Descubren un chalé de Miraflores con 880 plantas de marihuana

  • Distribuían la droga por la zona norte de la región
  • Hay cinco detenidos, tres ciudadanos de origen marroquí y dos españoles
Un agente de la Guardia Civil
Un agente de la Guardia Civil observa el Albergue Juvenil Los Batanes, en Rascafría, durante el confinamiento por la covid-19 |Europa Press

Agentes de la Guardia Civil pertenecientes Area de Investigación de la Compañía de Colmenar Viejo, junto al Puesto de Miraflores de la Sierra y la Unidad de Seguridad Ciudadana de la Comandancia de Madrid han logrado desmantelar una organización criminal especializad en el cultivo, recolección y venta de marihuana en la zona norte de la región. Los detenidos son tres ciudadanos de origen marroquí y dos españoles, con edades comprendidas entre los 24 y los 39 años, quién serán puestos a disposición judicial en las próximas horas.

La Guardia Civil ha realizado actuaciones en las localidades de Guadalix de la Sierra, Valdemanco y Miraflores de la Sierra, realizando un registro domiciliario en esta última localidad en un chalé unifamiliar, donde se lograron intervenir 881 plantas de marihuana en avanzado estado de germinación que estaba perfectamente acondicionada con sistemas de ventilación y de riego, además de otros elementos utilizados para el cultivo de cannabis sativa.

Gracias a las informaciones que se recogieron en el puesto de la Guardia Civil de Miraflores en septiembre, los agentes iniciaron labores de vigilancia en una urbanización de la localidad, ubicando una vivienda donde se detectaron movimientos extraños.

Durante los meses que ha durado esta investigación, constataron que el líder del grupo era un ciudadano de nacionalidad marroquí y vecino de Miraflores quien contaba con la colaboración de una pareja de ciudadanos españoles que se encargaban de la búsqueda de la vivienda idónea, la gestión del alquiler de la misma y el contrato de los suministros, aportando nóminas falsas para conformar todos los requisitos.

Para el cuidado de la plantación, el cabecilla contaba con un individuo de nacionalidad marroquí que se encontraba en situación irregular en nuestro país por lo que no salía para nada de la vivienda.

Por último, estaba otro individuo que se encargaba de realizar la compra de víveres para su compatriota, de la recolección y la venta de la marihuana.

En el momento de realizar la intervención, los guardias civiles identificaron a uno de los objetivos circulando con su vehículo, careciendo de permiso de conducir, por lo que se le investigó además por un delito contra la seguridad vial.