Las dieciséis últimas familias que vivían en El Ventorro han abandonado hoy este poblado del distrito de Villaverde para integrarse socialmente y unirse a las 445 familias que han dejado atrás sus chabolas en varios barrios de tipología especial de la capital para trasladarse a una vivienda digna. El Ventorro era el último gran núcleo de infraviviendas de la capital y hoy, en virtud del convenio firmado en 2008 entre el Ayuntamiento y la Comunidad de Madrid, ha quedado eliminado como ocurriera con los poblados de El Cañaveral, Santa Catalina y Mimbreras II.