Consumo abrió 134 expedientes sancionadores en la Comunidad

  • Por más de un millón de euros
  • En 2014 inició 5.409 expedientes de inspección en materia de consumo

La Comunidad de Madrid inició el año pasado 5.409 expedientes de inspección en materia de consumo, de los que 134 acabaron en sanción con 1.012.675 euros en multas y entre los que destacan los ocho expedientes sancionadores a entidades bancarias por cláusulas abusivas en cuentas corrientes y tarjetas.

Así se recoge en el balance de las 25 campañas de inspección ejecutadas en 2014 y que han presentado la directora general de Consumo, Mar Pérez Merino, y el consejero de Economía y Hacienda, Enrique Ossorio, quien ha avanzado el programa de inspección para este año.

En 2014 se registraron unas 22.000 reclamaciones y se ejecutaron 25 campañas de inspección -dos más de las programadas-, y su tipología abarcó desde gasolinas y gasóleos a empresas de servicios funerarios, centros de depilación láser, cláusulas abusivas de los bancos y establecimientos de compro-oro, entre otras.

Madrid repitió como la región española "más activa" en cuanto a número de notificaciones incorporadas a la red de alerta de productos inseguros o peligrosos con un total de 129 alertas, el 84% de ellas por riesgo grave.

PRINCIPALES FOCOS DE CONFLICTO

Según recoge el balance de inspección, el control de los técnicos de Consumo derivó en la apertura de ocho expedientes sancionadores a entidades bancarias por la utilización de cláusulas abusivas para el consumidor en contratos de cuenta corriente y de tarjetas.

Ésta fue una campaña pionera como también la que se desarrolló en entidades no bancarias que ofrecen créditos rápidos y en las "gasolineras desatendidas" en las que se detectó ausencia de hojas de reclamación y no devolución del cambio, por lo que, tras ser apercibidas, volverán a ser objeto de nuevas inspecciones.

Las aerolíneas Ryanair, Luftansa e Iberia tuvieron que modificar en sus páginas web la información referida a condiciones de facturación, embarque e información legal al consumidor, mientras que en medio centenar de empresas relacionadas con la venta on line de productos, servicios y vivienda se detectaron cláusulas abusivas y publicidad engañosa.

En los establecimientos de 'compro oro' se continuó la campaña de inspección iniciada en 2013 y se comprobó que el 75% de ellos había cerrado y que, en los que aún estaban activos, el 41% de las piezas no tenían contraste y el 65% presentaba irregularidades en sus básculas de pesaje.

La telefonía y las empresas de instalación de gas se mantuvieron como los sectores con más reclamaciones y se efectuaron, en el primer caso, controles de los servicios de tarificación adicional y de teléfonos con código de acceso 02, 06, 07 y 05. Las empresas de gas contabilizaron entre 2013 y 2014 un total de 573 reclamaciones y denuncias de los consumidores por prestación fraudulenta o deficiencia en el servicio contratado.

La inspección a 21 de estas empresas derivó en 16 expedientes sancionadores -10 de ellos ya resueltos- con multas de entre 3.600 y 26.805 euros. Además, se han derivado a la Fiscalía de Madrid las actuaciones de ocho empresas por presunta infracción penal.

En cuanto a la vivienda de segunda mano que obra en poder de los bancos, se constató que ninguna entidad informa del precio final de los pisos y que recogen cláusulas abusivas por permitir a la empresa modificar el precio final sobre el ofertado.

En 2014 se realizaron en la Comunidad de Madrid 5.678 actuaciones inspectoras sobre 5.409 expedientes en las 25 campañas de inspección ejecutadas, en las que se integraron las 2.927 denuncias de consumidores recibidas en la Dirección General de Consumo.

Además, se resolvieron 141 expedientes por un importe sancionador de 785.208 euros; se emitieron 2.163 informes; se levantaron 1.367 actas de inspección; y se retiraron 222.948 unidades de productos inseguros y peligrosos, la mayoría fruto de una operación desarrollada durante la pasada campaña de Navidad.

Para 2015 se han programado 26 campañas de inspección que abarcarán, entre otros, los cigarrillos electrónicos y productos para vapeo, las cláusulas suelo en hipotecas y los servicios de atención al cliente en empresas.