La Comunidad de Madrid atendió en 2021 a un 14,5% más de animales silvestres

  • Atendió a un total de 5.550 ejemplares
Un ave atendido en el Centro de Recuperación de Animales silvestres de la Comunidad de Madrid
Un ave atendido en el Centro de Recuperación de Animales silvestres de la Comunidad de Madrid |Europa Press

La Comunidad de Madrid atendió a un total de 5.550 ejemplares en su Centro de Recuperación de Animales Silvestres (CRAS) en 2021, un 14,5% más que el año anterior, en el que recogieron 4.814 animales.

Según informó la Comunidad, el CRAS tiene como objetivo “la salvaguarda y recuperación de la fauna autóctona protegida, mediante el cuidado, mantenimiento, restablecimiento y posterior devolución al medio natural de los ejemplares de especies catalogadas, que se encuentren incapacitadas para la supervivencia en su propio medio”, habiendo atendido desde su puesta en marcha en 2010 a un total de 41.856 ingresos.

Cómo es la atención en los centros de recuperación

Durante su permanencia en el centro, se realiza un chequeo completo de los animales para detectar lesiones y síntomas, determinar la causa de su hospitalización y su procedencia, en qué circunstancias se ha encontrado y qué se sospecha que ha ocurrido.

Posteriormente, ingresan en una UCI donde reciben los tratamientos clínicos y los cuidados necesarios, a la espera de que completen su rehabilitación y puedan ser reintroducidos, cuando sus posibilidades de vida en el entorno natural así lo permitan.

Este centro cuenta con una dotación presupuestaria de 1,4 millones de euros anuales, que permiten atender de manera eficaz a los animales que necesitan un cuidado inmediato y dar una respuesta rápida a los ciudadanos que se encuentran algún animal silvestre incapacitado.

Los ejemplares más habituales en la región son los mapaches, las cotorras, los galápagos invasores, los visones americanos, los gansos del Nilo y los cerdos vietnamitas

La mayoría de las entradas de aves heridas en el CRAS tiene lugar durante la época de cría, que coincide con el aumento de las temperaturas y las olas de calor, lo que se traduce en pollos que se caen del nido sin saber volar o que saltan del mismo antes de tiempo por soportar mucho calor.

De este modo, en el periodo comprendido entre los pasados meses de mayo y septiembre, más de 3.700 ejemplares ingresaron en el CRAS, siendo los vencejos la especie más abundante (931), seguido de gorriones (380) y urracas (323).