La alcaldesa de Madrid ha presidido la jornada Infancia y Ciudad, un debate con profesionales para perfilar un Madrid donde los niños tengan cabida, puedan ir solos al colegio, se les escuche y vuelvan a jugar en las calles y las aceras.
La alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, ha expuesto su intención de crear un foro a través de Internet desde el que los niños puedan transmitir ideas y propuestas al Ayuntamiento en el marco de un debate en el que ha lamentado que estén fuera de las instituciones y solo tengan presencia en la escuela y en casa.
"Hay muchos niños ahora que en muchos momentos están solos frente a sus aparatos y que dicen cosas; yo quiero oirlas", ha afirmado la alcaldesa durante un debate en CentroCentro con el prestigioso psicopedagogo Francesco Tonucci sobre cómo hacer de Madrid una ciudad "amable para la infancia".
La exjueza ha lamentado que en las ciudades el espacio público sea cada vez más restringido y no se otorgue a los niños su "necesario protagonismo", pues considera que todos los entornos deberían de estar concebidos para compartirlos con ellos.
"Recuerdo por ejemplo un día cuando yo estaba en el tribunal que el agente judicial vino casi en estado de shock y dijo: 'Viene la acusada pero viene con su niño, ¿qué hacemos, doña Manuela?' Y le dije: 'Pues nada, que pasen los dos, no es problema, nos acoplaremos", ha comentado la alcaldesa para ilustrar cómo también los espacios de trabajo pueden adaptarse a la presencia de niños. Y ella misma se llevó la cuna de su hija mayor a la oficina, ha recordado.
Carmena, que dice sentir una "grandísima corriente de ternura hacia los niños" desde que como "efecto de la edad" percibe una "enorme responsabilidad" de hacer posible un mundo mejor para ellos, se ha mostrado partidaria de escucharlos de una manera "natural" y no institucionalizada, como a su juicio sucede en organismos como los Consejos de Niños, que a su modo de ver carecen de la "espontaneidad" necesaria.
Sí ha lamentado que en el Ayuntamiento no haya "publicaciones" ni nada pensado para ellos, algo que ella quiere cambiar y de lo que se dio cuenta cuando recibió la visita de unos niños del Sáhara a los que quería regalar algo: "Lo único que me dieron fue unos gorros de lluvia", ha comentado la alcaldesa, que los ofreció con "vergüenza" a los pequeños, residentes en el desierto.
"Tenemos que pensar qué tipo de nuevos ciudadanos creemos que pueden más felices, más necesarios y más solidarios para el mundo que viene", ha dicho en referencia al modelo educativo que los adultos diseñan para los niños la alcaldesa, partidaria de que el Consistorio ayude a "una reflexión educativa profunda" en Madrid. "Creo que la administración tiene una gran capacidad de acción y hay que ponerla al servicio de la movilización, de la emulsión de la ciudadanía", ha comentado.
Durante su intervención en el foro "¿Cómo hacer las ciudades mejores para los niños?", el prestigioso pedagogo Francesco Tonucci ha alertado hoy de que, a diferencia de lo que sucedía a principios de siglo, los "débiles" (niños, discapacitados y ancianos) han desaparecido de las ciudades, pensadas por y para los adultos.
"Por alguna razón se eligió reconstruir la ciudad para alguien: un adulto varón trabajador", ha comentado Tonucci sobre el proceso de reconstrucción de la ciudad moderna que en Europa se produjo tras la Segunda Guerra Mundial y en España tras la Guerra Civil.
En su opinión, las ciudades se han vuelto hoy en día lugares para los coches en los que los niños prácticamente ya no tienen cabida, y menos de forma autónoma: "Los niños piden más autonomía y más libertad, y los padres piden más control, más vigilancia y más seguridad".
Y en esta disyuntiva casi siempre salen ganando los adultos, ha expuesto el psicopedagogo, que también alerta del "miedo" imperante en las familias y la sociedad -"el miedo no tiene relación con el peligro"- que actúa como un límite a la autonomía de los pequeños.
En el debate también ha intervenido el concejal delegado de Desarrollo Urbano Sostenible, José Manuel Calvo, contrario al modo en que se urbanizan los nuevos barrios -como los del sur de Madrid- donde se construyen avenidas del tamaño del Paseo de la Castellana que no favorecen en absoluto la autonomía de los niños.
"Creo que tenemos que repensar la ciudad desde la dimensión urbana y humana", ha defendido el responsable del urbanismo madrileño en el marco de un debate en el que también han participado la directora de un colegio público Sara Ballesteros, la experta en infancia y ciudad Marta Román, el pedagogo Fidel Revilla y el miembro del colectivo Zuloark Manuel Pascual.
