Ahora Madrid y PSOE aprueban la oficina antifraude cuestionada por PP y C's

  • Manglano lamenta que la Oficina contra la Corrupción será el "sheriff de Carmena"
  • Causapié dice que Oficina "protege a los funcionarios" que destapan corrupción y no les "desprecia" como ahora

El PSOE y Ahora Madrid han aprobado el reglamento de la nueva Oficina contra el Fraude y la Corrupción del Ayuntamiento de Madrid, un organismo autónomo que buscará prevenir y perseguir las prácticas corruptas y que para el PP y Ciudadanos es una "herramienta política" que busca controlar a los funcionarios.

El reglamento de la nueva oficina, cuyo director podrá ser nombrado en segunda votación por mayoría absoluta del Pleno, se ha aprobado en una sesión extraordinaria de la comisión permanente de Participación Ciudadana, Transparencia y Gobierno Abierto, aunque será la semana que viene cuando el Pleno le dé luz verde de forma definitiva.

La creación de este organismo de lucha contra la corrupción en el ámbito municipal emana del pacto entre el PSOE y Ahora Madrid -que integra a Podemos- para la investidura de Manuela Carmena, según ha recordado hoy la portavoz socialista, Purificación Causapié.

La comisión ha rechazado -con los votos del PSOE y Ahora Madrid- la enmienda a la totalidad presentada por el PP y apoyada por C's, puesto que a juicio del edil popular Percival Manglano la oficina dará "facultades inquisitoriales" a su director y servirá para el "señalamiento a los funcionarios" con el objetivo final de "politizar" el organismo.

Según ha detallado el tercer teniente de alcalde de Madrid, Mauricio Valiente, del máximo responsable de la oficina dependerá un consejo asesor donde estará representada la "sociedad civil". Sus funciones no serán únicamente "inspectoras" sino también de "prevención de las conductas", unas tareas "esenciales para el fortalecimiento de la ética en la actuación pública", ha dicho el representante de Ahora Madrid en la comisión.

Fuentes municipales han explicado a los medios que aspiran a que el director del ente esté elegido antes de finalizar este año, aunque la oficina no se pondrá en marcha previsiblemente hasta mayo de 2017. Según ha detallado en un comunicado el Consistorio, la Oficina investigará casos de uso o destino fraudulentos de fondos públicos o aprovechamientos ilícitos de conductas que comporten conflicto de intereses, entre otros aspectos.

Este nuevo órgano funcionará con autonomía en el ejercicio de sus funciones, quedando separada tanto del Gobierno como la Administración municipales y "para garantizar esta independencia, la Oficina se adscribirá al Pleno del Ayuntamiento, con representación de todos los grupos políticos".

Uno de los elementos que mayor controversia ha suscitado es el artículo 20 del reglamento, en el que se señala que la persistencia en una actitud hostil o entorpecedora de las actuaciones de inspección de la Oficina por parte de cualquier autoridad, directivo o empleado municipal podrá ser objeto de un informe especial.

La concejal de Ciudadanos Silvia Saavedra entiende que de esta idea emana que los "funcionarios son personas corruptas" y "no tienen derecho a la intimidad". "Pueden entrar en su oficina sin previo aviso y registrar su correspondencia", ha denunciado la edil, que se posiciona "absolutamente en contra" del organismo.

Tras asegurar que la "corrupción es un mal endémico", la edil de C's ha considerado que una oficina antifraude puede ser "algo muy positivo si está bien hecho, pero no si se hace de manera totalmente ideológica" y ha acusado al equipo de Gobierno de configurarla como una "herramienta política para meterse con los partidos de la oposición".

En cambio, Mauricio Valiente ha defendido hoy la oficina como un "instrumento muy útil" para todos los madrileños y también para los funcionarios -quienes, ha recordado, destaparon muchos de los casos de corrupción- y ha recordado que el reglamento se ha elaborado con los informes favorables de los servicios jurídicos.

"Cuantas más garantías existan más seguridad para el funcionario correcto", ha dicho. Buena parte de sus mecanismos, además, están "calcados" de las oficinas del Defensor del Pueblo, ante lo que Mauricio Valiente se ha preguntado si alguien puede decir de ese cargo que sea "un perseguidor" o "un gestapo".

Tanto la portavoz municipal, Rita Maestre, como la portavoz del PSOE, Purificación Causapié, han respondido a los medios tras la comisión que sí se ha informado a los sindicatos del contenido del reglamento de la oficina.

Además, en alusión a la posibilidad de que el director de la oficina sea elegido con mayoría absoluta de la cámara en segunda votación (en primera se requieren dos tercios), el edil del PP Percival Manglano ha dicho que éste será "un colocado más", "tan independiente como Paca Sauquillo (al frente del comisionado de Memoria Histórica), que es amiga personal de la alcaldesa, maoísta en su juventud y socialista". "Han creado ustedes al 'sherif' de Carmena", ha reprochado el popular a Ahora Madrid y el PSOE.

En cambio, tras recordar que fue una de las promesas electorales del PSOE, la portavoz socialista ha defendido la pertinencia de impulsar esta oficina "pionera" que en su opinión servirá de referencia para otros ayuntamientos. "Es una oficina que tiene que servir para prevenir la corrupción y da instrumentos a los empleados públicos frente a cualquier tipo de coacción y a los ciudadanos para denunciar", ha sostenido.