Agreden a dos vigilantes de seguridad en el Metro de Sierra de Guadalupe

Dos vigilantes de seguridad han sido agredidos en la estación de Metro de Sierra de Guadalupe por un hombre que presuntamente había intentado hurtar la cartera a un ciudadano sentado en un banco de uno de los andenes.

El portavoz del sindicato Alternativa Sindical de Trabajadores de Seguridad Privada, Alberto García, que aglutina a más de 4.000 vigilantes de seguridad, ha informado a Efe que los agredidos son un hombre y una mujer de la empresa Segur Ibérica.

Junto a ellos había un tercer vigilante que formaba con el agredido la "pareja" encargada de recorrer la línea 1 de Metro, mientras que la mujer vigilaba únicamente la estación de Sierra de Guadalupe, donde transcurrieron los hechos.

Según el sindicato, los tres vigilantes se encontraban en el vestíbulo principal de la estación cuando un hombre trató de hurtar la cartera a un viajero que en ese momento se encontraba adormecido en un banco.

Al despertar, se produjo un forcejeo y una discusión entre ambos que oyeron los vigilantes, quienes acudieron para mediar y detener al presunto ladrón, un hombre "fornido" que dio sendos empujones a dos de los trabajadores de seguridad, así como varios "guantazos".

Finalmente, los vigilantes consiguieron reducir al presunto agresor y, a continuación, presentaron una denuncia en la Comisaría de Policía de Entrevías.

Alternativa Sindical de Trabajadores de Seguridad Privada ha denunciado en un comunicado que "lamentablemente" este tipo de incidentes no son un hecho aislado y están "directamente relacionado con la reducción de la seguridad y la vigilancia en las estaciones de Metro como consecuencia de los ajustes presupuestarios".

"Los vigilantes de seguridad vienen sufriendo agresiones y amenazas prácticamente a diario, ya que en la mayoría de los servicios que se prestan en Metro de Madrid carecen de las medidas de seguridad necesarias para la protección personal y la de los usuarios y trabajadores de la red", ha señalado.

Según el sindicato, desde el pasado 1 de agosto de 2013, fecha del inicio del nuevo contrato de seguridad, se han producido diez agresiones a vigilantes de seguridad.