Más de 35.000 venezolanos cruzan la frontera para comprar comida y medicinas

  • La ministra de Exteriores de Venezuela se reúne con Rodríguez Zapatero en Caracas

Una marea de venezolanos, calculada en más de 35.000 personas por la cancillería colombiana, ha cruzado la frontera con Colombia para comprar en la ciudad de Cúcuta alimentos y medicinas que no consiguen en su país, aprovechando la apertura por unas horas de los pasos limítrofes.

Desde antes del amanecer ya había largas filas de personas que esperaban la apertura del paso en los puentes internacionales Simón Bolívar y Francisco de Paula Santander, que comunican a Cúcuta con las ciudades venezolanas de San Antonio del Táchira y Ureña, respectivamente, y que forman la frontera más dinámica de ambos países.

A las 5.00 hora local (10.00 GMT) la eufórica multitud de hombres, mujeres y niños empezó a pasar hacia Cúcuta, capital del departamento de Norte de Santander, luego de que el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, autorizara la apertura por unas horas de la frontera con esta ciudad, cerrados por orden suya desde el 19 de agosto del año pasado.

"Más de 35.000 personas, que es una cifra muy significativa pasaron la frontera y hasta el mediodía unas 10.000 ya habían regresado a Venezuela, esperamos que las demás lo hagan también de forma ordenada hasta el finalizar el día", dijo por teléfono a Efe el director del Plan Fronteras para la Prosperidad del Gobierno colombiano, Víctor Bautista.

El alboroto en los dos puentes internacionales fue diferente del dramatismo que tuvo hace casi once meses la expulsión de Venezuela de miles de colombianos después de que Maduro ordenó el cierre de la frontera en el marco de una campaña contra el contrabando y presuntos paramilitares.

Entre la multitud, algunos agradecían hoy con carteles a Colombia por facilitar este corredor humanitario. "Colombia, gracias por su solidaridad con Venezuela", exhibía en una pancarta una mujer que junto con su familia conversó en el puente Simón Bolívar con el gobernador de Norte de Santander, William Villamizar.

Una vez en territorio colombiano, los venezolanos se dirigieron a los supermercados de cadena y a los de barrio para comprar arroz, azúcar, mantequilla, aceite, papel higiénico, jabones y otros artículos de higiene personal, así como medicinas.

"En Venezuela no tenemos nada, gracias al país colombiano que nos está sacando de esta miseria que tenemos en Venezuela", dijo a Efe Irama Sayago, una mujer que regresaba con unos paquetes a su país.

Un hombre de unos 45 años, que prefirió no dar su nombre, aseguraba ya cerca de la línea fronteriza: "Gracias a Dios conseguí algo porque aquí no se consigue nada. Aunque sea por el río hay que volver a pasar porque mis hijos no pueden aguantar hambre".

En Cúcuta el ambiente era festivo, con el comercio haciendo su agosto en pleno julio por la avalancha de clientes venezolanos como en las mejores épocas de hace ya varios años, cuando los compradores del vecino país gastaban en la ciudad colombiana beneficiados por la tasa de cambio favorable del bolívar frente al peso, una relación que ahora está totalmente invertida.

La afluencia de venezolanos fue tan grande que en algunos puntos fue llamado el Escuadrón Móvil Antidisturbios (Esmad) de la Policía de manera preventiva para ayudar a mantener el orden en las largas filas que se formaron frente a los supermercados, pero hasta el final de la tarde no se había presentado ni un solo un incidente.

"Tomamos la determinación de ampliar el horario hasta las ocho de la noche y si es necesario hasta la medianoche para que entren al territorio nacional a hacer sus compras", explicó Bautista, quien como enviado de la cancillería coordina la acción de las autoridades colombianas en la frontera.

El funcionario señaló que en una verificación que hicieron las autoridades en los supermercados "no se detectaron problemas de desabastecimiento" y destacó que los venezolanos a pesar de su gran número, "han sabido comportarse sin alterar el orden".

Bautista agregó que junto con las autoridades locales y empresas de transporte público se habilitaron autobuses para trasladar a la gente desde la frontera hasta las principales zonas de comercio de Cúcuta, "no de manera gratuita pero sí con costos solidarios".

También se dieron facilidades para que venezolanos pudieran pasar durante unas horas por el paso fronterizo entre el estado de Apure y el departamento colombiano de Arauca a hacer sus compras.

"En el sentido humanitario, para el Gobierno es fundamental cooperar con el país vecino; Colombia es el socio natural de Venezuela por excelencia", manifestó.

LA MINISTRA DE EXTERIORES SE REÚNE CON ZAPATERO

La ministra de Exteriores de Venezuela, Delcy Rodríguez, se ha reunido con el expresidente español José Luis Rodríguez Zapatero, un encuentro en el que ha subrayado la voluntad del país de mantener "relaciones de cooperación y amistad con Europa".

"Hoy nos reunimos con expresidente José Luis Rodríguez Zapatero y con Edita Hrdá, directora general para América del SEAE (Servicio de Asuntos Exteriores de la Unión Europea)", ha indicado la ministra a través de su cuenta en la red social Twitter.

Rodríguez ha apuntado a través de esta vía el "agradecimiento" de Venezuela al "respaldo" de la Alta Representante de Política Exterior y de Seguridad Común de la UE, Federica Mogherini, al diálogo en el país.

Así, ha subrayado que durante la reunión "se compartieron visiones sobre los procesos de integración en Europa, América Latina y Caribe", al tiempo que ha recalcado la voluntad del presidente, Nicolás Maduro, de mantener relaciones con Europa "en el marco del respeto a la igualdad soberana de los estados".

Rodríguez Zapatero llegó el viernes en la capital venezolana, Caracas, donde tiene previsto reunirse con representantes tanto del Gobierno como de la oposición venezolana en un intento por continuar su trabajo de mediación en la crisis.

Su visita se debe, según explicó ante los medios, a que observa cierta disposición por parte del Gobierno y de la oposición venezolana hacia el restablecimiento de un diálogo, lo que definió como una oportunidad para mediar y lograr resultados positivos.

ZAPATERO, ENVIADO ESPECIAL DE LA UE PARA VENEZUELA

El Gobierno español ha dado su visto bueno a que Rodríguez Zapaterosea nombrado enviado especial de la UE para Venezuela, según ha confirmado el ministro de Exteriores en funciones, José Manuel García-Margallo.

"Vamos a ayudar a cualquier propuesta de mediación por lejanas que sean las esperanzas de que eso tenga resultados", ha dicho. Margallo siempre ha apoyado la labor de Zapatero en Venezuela, aunque se ha mostrado escéptico sobre sus posibilidades de éxito.

Según ha dicho, él ha hablado del nombramiento de Zapatero con la responsable de la política exterior europea, Federica Mogherini, y el propio Zapatero ha conversado con el jefe del Ejecutivo en funciones, Mariano Rajoy.

El ministro en funciones ha explicado que lo que se intenta es encontrar "una fórmula de diálogo que lleve a la reconciliación nacional y a la reconstrucción del país", y que Zapatero cuenta con el apoyo de UNASUR, si bien no es compartida por otros dirigentes del PSOE --especialmente por Felipe González-- ni por toda la oposición venezolana.

Otra vía, ha detallado, es la participación del exministro de Justicia español Alberto Ruiz-Gallardón en la defensa del opositor Leopoldo López, como ya hizo Felipe González.

Los ministros de Exteriores de la UE abordarán la situación de Venezuela en su Consejo del día 18 y ha avanzado que el Gobierno español reafirmará su posición de respeto a la institucionalidad, celebración del referéndum revocatorio en tiempo y forma, respeto a los Derechos Humanos, lo que implica liberación de los presos políticos, y ayuda a la reconstrucción del país.

"De los cien productos básicos 82 no existen, casi todos medicinas", ha dicho, tras calificar de "tremendo" que miles de venezolanos hayan salido a Colombia para comprar productos básicos.

CRISIS VENEZOLANA

La crisis en Venezuela se ha agravado desde el pasado 6 de diciembre, cuando la opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) ganó las elecciones parlamentarias dando lugar a una cohabitación inédita en la nación caribeña con la oposición en la Asamblea Nacional y el 'chavismo' en el Gobierno.

Desde entonces el Ejecutivo ha vetado numerosas leyes del Parlamento, incluida la Ley de Amnistía, por lo que la MUD ha activado el mecanismo para celebrar un referéndum revocatorio que acabe con el mandato de Nicolás Maduro antes de que expire oficialmente, en 2019.

La MUD ha protagonizado marchas masivas en los últimos meses para aumentar la presión sobre el Consejo Nacional Electoral (CNE) y lograr que convoque el referéndum revocatorio antes del 10 de enero de 2017 ya que, de lo contrario, aunque los venezolanos decidan el cese de Maduro, el vicepresidente, Aristóbulo Istúriz, gobernará hasta 2019.

Hasta ahora se ha conseguido dar por finalizado el primer paso para activar el revocatorio, y la oposición está a la espera de que el CNE anuncie una fecha para iniciar la segunda fase, en la que tendrán que recoger la firma del 20 por ciento de los censados, en torno a cuatro millones de rúbricas, en tan solo tres días.