Siria celebrará elecciones antes de que termine el año

  • El viernes al menos 24 personas murieron por tiros de las fuerzas de seguridad en Siria

El ministro sirio de Asuntos Exteriores, Walid al Mualem, ha asegurado que su país celebrará elecciones legislativas antes de final de año y que las urnas actuarán "de árbitro" en las reformas anunciadas por el presidente Bachar Al Asad.

Según la agencia oficial Sana, Al Mualem se reunió el sábado con los embajadores acreditados en Damasco y les dijo que las autoridades sirias están comprometidas con las reformas anunciadas por Al Asad, que no han conseguido hasta el momento acallar las protestas de miles de manifestantes que reclaman casi a diario su renuncia.

El jefe de la diplomacia siria agregó que habrá "elecciones limpias y justas que lleven a una Asamblea Popular que represente al pueblo sirio a través del pluralismo político, garantizado por la ley de partidos políticos y la ley electoral". Asimismo, enfatizó que el Parlamento elegido en los comicios revisará las leyes que se han adoptado para decidir sobre ellas.

Al Asad promulgó el pasado jueves los decretos legislativos 100, referido a la Ley de Partidos, y 101, sobre la Ley de Elecciones Generales, que abren el país al multipartidismo, aunque la oposición ha puesto en duda la efectividad de estas reformas, y ha cuestionado su demora, que llega tras meses de protestas y más de 2.000 muertes.

Para el ministro de Exteriores, el Gobierno sirio "insiste todavía en que el diálogo nacional es la vía para resolver la actual crisis", aunque, según él, "la ausencia de ese diálogo debido a la negativa de la oposición no nos deja otra opción que seguir la senda reformista". Al Mualem subrayó que su país centra sus esfuerzos en la seguridad, la estabilidad y en "detener los actos de vandalismo, llevando al país por el camino de la democracia y el progreso".

Sin embargo, la cifra de civiles muertos sigie aumentando y al menos 24 personas han muerto por disparos de las fuerzas de seguridad sirias, que tratabann de sofocar las masivas manifestaciones que el viernes volvieron a tomar las calles para protestar contra el régimen de Bashar Asad.

Según señaló el grupo opositor Comités de Coordinación Local, se han registrado este viernes al menos siete fallecidos por las balas de las fuerzas de seguridad en Arbin (al oeste de Damasco), dentro de la jornada bautizada como "Dios está con nosotros".