Obama pide a Corea del Norte que abandone su amenaza de lanzar un satélite

Obama, en Corea
Obama, en Corea |Telemadrid

El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, y el de Corea del Sur, Lee Myung-Bak, pidieron hoy a Corea del Norte que abandone su amenaza de lanzar un satélite, que sería una "violación directa de sus propios compromisos".

En una rueda de prensa en Seúl, donde mañana se inaugura la II Cumbre de Seguridad Nacional y donde hoy ambos mandatarios celebraron una reunión bilateral, Obama afirmó que el lanzamiento "profundizaría el aislamiento de Corea del Norte, dañaría aún más sus relaciones con sus vecinos y perjudicaría cualquier posibilidad de negociaciones".

El presidente estadounidense indicó que si Corea del Norte decidiera finalmente llevar a cabo el lanzamiento del satélite sobre un misil de largo alcance, EE. UU. encontraría "difícil" entregar la ayuda alimentaria acordada bilateralmente el mes pasado.

El pasado 29 de febrero ambos países alcanzaron un acuerdo por el cual Corea del Norte se comprometía a abandonar sus pruebas nucleares y de misiles de largo alcance a cambio de recibir 240.000 toneladas en ayuda alimenticia.

Washington y Seúl alegan que el lanzamiento representaría una violación no sólo de ese acuerdo sino también de los compromisos internacionales de Corea del Norte, que quiere lanzar el misil para conmemorar el centenario del que fuera su líder Kim Il Sung.

"Les hemos indicado muy claramente que encontraríamos difícil seguir adelante con el acuerdo" de asistencia alimentaria si Corea del Norte lanzara el misil.

"Es difícil suministrar ayuda si uno no piensa que vaya a llegar a la gente que la necesita", sostuvo el presidente estadounidense.

Además, recordó, en otras ocasiones medidas similares por parte de Corea del Norte han merecido un mayor aislamiento y el endurecimiento de las sanciones internacionales.

"Sospecho que en esta ocasión ocurriría lo mismo", declaró el presidente estadounidense.

Por su parte, Lee subrayó que el lanzamiento "aumentaría el aislamiento de Corea del Norte" y pondría de manifiesto entre la población de ese país "la verdadera naturaleza de sus líderes".