Margallo comienza su agenda en Cuba reuniéndose con responsables de Comercio

  • Las Damas de Blanco piden a Margallo un encuentro en Cuba

El ministro español de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, llegó a La Habana para cursar su primera visita oficial al país caribeño con el propósito de "pasar revista" a la relación bilateral y repasar una nutrida agenda de asuntos internacionales y regionales de interés mutuo.

Se trata del primer viaje a Cuba de un jefe de la diplomacia española desde el año 2010 y también del único ministro del Gobierno del presidente Mariano Rajoy (Partido Popular, conservador) que ha visitado hasta ahora el país caribeño.

En declaraciones en el Aeropuerto de La Habana, el ministro explicó que el objetivo de su visita es "pasar revista" a los lazos bilaterales y destacó que las relaciones entre España y Cuba "son probablemente de las más próximas que podemos tener en el mundo".

Añadió que buena parte de su agenda en Cuba se centrará también en repasar asuntos de índole regional e internacional como la próxima Cumbre Iberoamericana que se celebrará en Veracruz (México), que calificó como "un acontecimiento clave" en el proceso para refundar estos foros que comenzó en Cádiz y siguió en la cita del año pasado en Panamá. "Que Veracruz sea un éxito es para nosotros de capital importancia", dijo.

La actual negociación entre la Unión Europea y Cuba para llegar a un acuerdo bilateral, el papel de España como miembro no permanente del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, o la revitalización de las conferencias entre la UE y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y del Caribe (Celac) serán también asuntos destacados en la agenda de Margallo.

Preguntado en el Aeropuerto de La Habana si trae al gobierno cubano "mensajes concretos" de Estados Unidos, tal y como publicó hoy el diario español "El País", el ministro se limitó a decir que los mensajes entre gobiernos "se trasladan a los gobiernos, no se explicitan en los medios".

Durante su visita, que finalizará el próximo martes, García-Margallo se reunirá con autoridades cubanas como su homólogo, Bruno Rodríguez, el ministro de Comercio Exterior, Rodrigo Malmierca, y con el vicepresidente del Consejo de Ministros de Cuba, Ricardo Cabrisas. Es previsible que el presidente de Cuba, Raúl Castro, reciba a García-Margallo el martes por la tarde.

El jefe de la diplomacia española abrirá el lunes su agenda oficial en la isla con un desayuno de trabajo con la Asociación de Empresarios Españoles en Cuba (AEEC), única de su tipo que existe en la isla. E

spaña, tercer socio comercial de Cuba, tiene una destacada presencia empresarial en el país caribeño, donde actualmente operan más de 230 sucursales u oficinas de firmas españolas, más otra treintena de compañías en la modalidad de empresas mixtas con el Estado cubano.

También este lunes, García-Margallo impartirá una conferencia en el Instituto Superior de Relaciones Internacionales (Isri) sobre "Vivir la transición. Una visión biográfica del cambio en España", para después realizar un recorrido por La Habana Vieja, el casco histórico de la capital cubana, acompañado del historiador de la ciudad, Eusebio Leal.

El martes 25, García-Margallo mantendrá conversaciones oficiales con el ministro de Exteriores, Bruno Rodríguez, después de realizar la tradicional ofrenda floral ante el monumento al héroe nacional y prócer independentista cubano, José Martí, en la emblemática Plaza de la Revolución de La Habana.

El viaje de García-Margallo se produce en un momento en el que Cuba, inmersa en un plan de reformas económicas para "actualizar" su socialismo, negocia con la Unión Europea (UE) un acuerdo de diálogo político y cooperación.

El país caribeño es el único de América Latina con el que la UE no tiene un acuerdo bilateral y al que el bloque europeo aplica la llamada "posición común", una política aprobada en 1996 a instancias del entonces presidente español José María Aznar (Partido Popular), y que ha condicionado el diálogo a avances democráticos y en materia de derechos humanos.

La última visita de un ministro de Asuntos Exteriores español a Cuba fue la del socialista Miguel Ángel Moratinos en julio de 2010, cuando se entabló un acuerdo con el gobierno de Raúl Castro y la Iglesia Católica cubana para la excarcelación de un amplio grupo de presos políticos y su envío a España.

Durante el gobierno de Mariano Rajoy, el principal dirigente del PP que ha visitado Cuba ha sido el presidente de Galicia, Alberto Núñez Feijoo, en diciembre de 2013. El jefe de la diplomacia ve también un "componente humano" en su viaje, pues en virtud de la ley de Memoria Histórica se han multiplicado por 10 el número de españoles en la isla, que en la actualidad ascienden a 118.000, 80.000 de los cuales obtuvieron la nacionalidad gracias a la citada norma.

El departamento que dirige José Manuel García-Margallo estima que, si los 100.000 hijos de estos nuevos españoles también optan por pedir la nacionalidad española, en unos años la colonia española en la isla podría ascender a 400.000 personas y Cuba se convertiría en el segundo país latinoamericano con mayor número españoles, sólo por detrás de Argentina, según han informado fuentes diplomáticas.

Por eso, se espera que García-Margallo plantee a sus interlocutores cubanos la necesidad de contar con un Consulado de España en La Habana lo suficientemente amplio como para atender a estos ciudadanos.

LAS DAMAS DE BLANCO PIDEN A MARGALLO UN ENCUENTRO EN CUBA

El movimiento cubano de las Damas de Blanco, formado por mujeres de expresos políticos, ha pedido al ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, José Manuel García-Margallo, de visita en la isla, que encuentre un hueco para reunirse con ellas y con aquellos disidentes excarcelados a los que el régimen aún niega el derecho de viajar.

La líder del grupo, Berta Soler, a quien el ministro ha recibido en una de sus visitas a Madrid, ha hecho pública este lunes una carta que dirigió al ministro García-Margallo el pasado 28 de octubre, cuando tuvo conocimiento de los planes del jefe de la diplomacia española de viajar a la isla.

"Espero que pueda encontrar en su apretada agenda un espacio para reunirse en Cuba con una representación del Movimiento Damas de Blanco y otros miembros de la sociedad civil. Especialmente desearía que pudiera reunirse con los presos que fueron encarcelados en la Primavera Negra de 2003, que aún permanecen en Cuba, y a quienes el Gobierno cubano niega el derecho de viajar", reza la breve misiva.

"Sea cual sea su decisión, le deseamos de antemano una agradable estancia en Cuba", se despide Soler en la carta. La agenda del ministro no incluye encuentros con la oposición, a quienes se recibe en Madrid desde que obtuvieron permiso en 2013 para viajar al extranjero.