Los países donantes darán más de 16.000 millones de dólares a Afganistán entre 2012 y 2015 para el desarrollo del país y mantendrán hasta 2017 una ayuda "cercana al nivel" de la facilitada la pasada década, según la declaración emitida hoy al término de la Conferencia de Tokio sobre Afganistán.
El Gobierno afgano, por su parte, se comprometió a fortalecer la gobernanza, los derechos humanos y el Estado de Derecho, así como potenciar la lucha contra la corrupción y mejorar la gestión financiera.
"El Gobierno afgano cumplirá estos compromisos. No hablamos de lo que ha ocurrido hasta ahora, sino de lo que ocurrirá en el futuro", aseguró en una rueda de prensa tras la conferencia el ministro afgano de Exteriores, Zalmai Rassoul.
La ayuda prometida en Tokio está en línea con la solicitada por el Gobierno afgano, que había pedido unos 4.000 millones de dólares anuales en asistencia civil en los próximos años.
Tras la reunión en la capital nipona, de un día, los 55 países y 25 organismos internacionales asistentes emitieron la "Declaración de Tokio", que establece "nuevas bases más fuertes" para una asociación que respalde el crecimiento y desarrollo afgano en la década posterior a la retirada de las tropas, en 2014.
A este documento se sumó un segundo, el llamado "Marco de Tokio de Responsabilidad Mutua", que detalla los compromisos de ambas partes -tanto de la comunidad internacional como del Gobierno de Kabul- para el desarrollo afgano en los próximos años.
Así, la ayuda al desarrollo estará supeditada al cumplimiento de estas promesas, que por parte afgana incluyen la mejora de la gobernanza, de la igualdad y los derechos humanos, de la lucha contra la corrupción y el narcotráfico y unas elecciones presidenciales creíbles y transparentes en 2014.
La comunidad internacional, por su parte, se compromete a dar "pasos concretos" para mejorar la distribución de la ayuda de forma eficiente y en línea con las prioridades de desarrollo delineadas por Kabul.
Está previsto que en 2014 se dé seguimiento a estas cuestiones en una conferencia ministerial sobre Afganistán que tendrá lugar en el Reino Unido, indicó el ministro japonés de Asuntos Exteriores, Koichiro Gemba.
La Conferencia de Tokio tuvo lugar apenas dos meses después de la cumbre de la OTAN en Chicago (EEUU), en la que el organismo se comprometió a destinar 4.100 millones de dólares a Afganistán tras el repliegue total de las tropas destinados a las fuerzas locales de seguridad.
