La UE presiona a Grecia tras su anuncio del referendo

  • Barroso advierte a Grecia de consecuencias "dolorosas" si se rechaza el plan
  • Francia y Alemania piden a Grecia decir claramente si quiere seguir en la zona euro

El presidente de la Comisión Europea, Jose Manuel Durao Barroso, advirtió a Grecia de consecuencias "dolorosas" si finalmente se rechaza el plan de rescate acordado con la Unión Europea y el FMI la semana pasada. La Unión Europea (UE) y el Fondo Monetario Internacional (FMI) sopesan congelar la concesión del sexto tramo de ayuda internacional de 8.000 millones de euros a Grecia, si se celebra el referéndum anunciado por el Gobierno de ese país.

Así lo sostuvieron fuentes comunitarias poco después del comienzo de una reunión en Cannes (Francia) entre los líderes de Francia y Alemania y representantes de la UE, el FMI, el eurogrupo y el Banco Central Europeo (BCE) para abordar la convocatoria de esa consulta.

En una declaración realizada a su llegada a Cannes (Francia), donde este jueves se inicia la cumbre del G20, Barroso indicó que "sin el acuerdo de Grecia con la UE y el FMI, las condiciones para los ciudadanos griegos serán mucho más dolorosas, y sobre todo para los más vulnerables. Las consecuencias son imposibles de predecir".

Precisamente, la UE ha convocado para este miércoles en Cannes una reunión de urgencia con el primer ministro griego, Yorgos Papandréu, para que explique la sorpresiva convocatoria de un referéndum en el que los griegos se deberán pronunciar sobre el plan de rescate acordado la pasada semana.

Este plan de rescate contempla una quita del 50 por ciento de la deuda griega, el desembolso del sexto tramo del primer plan de rescate, que supone unos 8.000 millones de euros, y la puesta en marcha de un segundo paquete de medidas por importe de unos 130.000 millones de euros.

En la reunión con Papandréu participarán, además de Barroso, el presidente francés, Nicolas Sarkozy; la canciller alemana, Angela Merkel, la directora gerente del Fondo Monetario Internacional, Christine Lagarde; el responsable del Eurogrupo, Jean-Claude Juncker y Consejo Europeo, Herman Van Rompuy.

Todos ellos mantendrán también esta tarde una reunión previa, sin Papandréu, para fijar una postura común. Algunos medios auguran que la UE y el FMI amenazará al líder griego con suspender el desembolso del sexto tramo si no acerca su postura a la de sus socios europeos.

En un comunicado, Barroso quiso aprovechar su presencia en Cannes para referirse a la complicada situación política que vive Grecia. "Quiero hacer un llamamiento urgente y sincero a la unidad nacional y política de Grecia", afirmó.

En su opinión, la estabilidad del país heleno es crucial para poder poner en marcha las medidas de rescate acordadas por la Unión Europea.

Ante la perspectiva de que la situación empeore si se rechaza el plan, Barroso pidió un esfuerzo a los líderes griegos para que demuestren que "están preparados para trabajar por la unidad política nacional y para conseguir el más amplio apoyo al plan" de la UE.

De hecho, dice Barroso, "la Comisión ha estado pidiendo este apoyo desde el comienzo de la crisis. Si este apoyo era importante ayer, hoy es absolutamente crucial".

FRANCIA Y ALEMANIA PIDEN QUE GRECIA DIGA CON CLARIDAD SI QUIERE SEGUIR EN EL EURO

El primer ministro francés, François Fillon, lamentó la decisión del Gobierno griego de someter a referendo el plan de rescate financiero a Grecia aprobado la semana pasada y pidió al país que diga "rápido y sin ambigüedad si quiere conservar su lugar en la zona euro".

El anuncio del primer ministro griego, Yorgos Papandréu, sobre la celebración de un referendo "puede tener consecuencias muy graves para Grecia y el resto de Europa", dijo Fillon durante la sesión de control al Ejecutivo en la Asamblea Nacional, en la que lamentó "solemnemente ese anuncio tomado de manera unilateral".

Por su pate, la canciller alemana, Angela Merkel, exigió hoy "claridad" al primer ministro griego, Yorgos Papandréu, si quiere seguir siendo receptor de la solidaridad europea tras el anuncio de un referendo sobre el segundo rescate.

La jefa del Ejecutivo federal agregó que esta tarde se entrevistará con Papandréu en Cannes (Francia), en la víspera de la cumbre del G20, para estudiar si el programa de ayuda financiera a Atenas acordado en la cumbre de la eurozona de la semana pasada sigue vigente tras la convocatoria del plebiscito.

SARKOZY CONVOCA PARA ESTE JUEVES A LOS LÍDERES DE LA EUROZONA

El presidente francés y anfitrión de la cumbre del G20, Nicolas Sarkozy, ha convocado para este jueves una reunión con el resto de líderes de la eurozona que se encuentran en Cannes (sureste de Francia) para analizar los últimos acontecimientos de la crisis griega.

El encuentro ha sido convocado para las 10.30 hora local (09.30 GMT) y a ella asistirá el jefe del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, y el primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, además de los presidentes de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, y del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy. La canciller alemana, Angela Merkel, tiene a esa misma hora una reunión bilateral con el presidente estadounidense, Barack Obama, por lo que acudirá al encuentro europeo su ministro de Finanzas, Wolfgang Schäuble.

El objeto de la cita, según las mismas fuentes, es fijar una postura común europea ante la cumbre del G20, que se inicia este jueves en Cannes.

PAPANDREU SE JUEGA SU FUTURO

El primer ministro socialista griego, Yorgos Papandréu, se juega su futuro al frente del Gobierno con una moción de confianza que añade aún más tensión a la crisis del euro tras el terremoto causado por su anuncio de convocar un referéndum sobre el segundo rescate a Grecia. El debate parlamentario de tres días sobre la moción de confianza propuesta por Papandréu se inicia hoy y culminará con una votación nominal en la medianoche del viernes al sábado, en la que Papandréu deberá de obtener un mínimo de 151 votos a favor para no fracasar.

La decisión del dirigente socialista de celebrar un referéndum sobre el acuerdo de sus socios europeos para evitar la quiebra de Grecia tomó por sorpresa incluso a sus ministros y ha desatado una gran crisis política nacional.

La disidencia que afronta el primer ministro dentro de su propio grupo parlamentario lo han dejado con 152 escaños, de los 160 que tenía cuando ganó las elecciones hace 25 meses, y podrían costarle el puesto en la actual legislatura, que termina oficialmente en octubre de 2013.

La decisión de la pasada madrugada, asumida unánimemente por el Consejo de Ministros, tras una reunión extraordinaria de siete horas de convocar el referéndum y crear una comisión para acelerar su celebración en diciembre y no en enero, no ha calmado los ánimos.

Según declaró Papandréu a sus ministros, el dilema "no es de elegir a uno u otro Gobierno", descartando elecciones anticipadas, sino de aprobar o no un acuerdo para un nuevo rescate a Grecia, y de decidir si quedarse en Europa y en el euro.

Papandréu ha sido citado para hoy por los líderes europeos y del Fondo Monetario Internacional (FMI) en Cannes (Francia), al margen de la cumbre del G20, para explicar su iniciativa de un plebiscito que han sembrado una gran incertidumbre en los mercados bursátiles.

Ayer, una diputada socialista, Milena Apostolaki, renunció a la disciplina de voto por estar en contra del referéndum y dejó al primer ministro solo con un escaño de margen (152) para mantenerle en el poder con un gobierno en solitario, de un total de 300 diputados en el Parlamento. Además, una decena de diputados socialistas, entre ellos Vaso Papandréu, Eva Kaili, Dimitris Lintseris y Soula Merenditi, hicieron declaraciones públicas y con cartas dirigidas a Papandréu en las que piden que forme un gobierno de salvación nacional, con o sin su persona.

Por otro lado, Papandréu cuenta con el apoyo, por el momento, de la diputada independiente y disidente conservadora Elsa Papadimitríu, que declaró ayer que votará a favor de Papandréu el viernes, porque "las elecciones anticipadas serían una catástrofe y tal vez llevarán a Grecia fuera del euro".

El líder del principal grupo de la oposición, la conservadora Nueva Democracia, Antonis Samarás, tildó hoy a Papandréu de "irresponsable" y criticó que con el referéndum "muestra el pánico en el que se halla el Gobierno, que debe de irse lo antes posible".