Las autoridades españolas aceleran los trámites para la repatriación de los cadáveres de los dos ciudadanos españoles muertos y de los dos supervivientes del ataque perpetrado el miércoles por yihadistas en el museo de Túnez, que podría realizarse esta tarde. Todo depende de las autoridades tunecinas, en un día festivo en el país que celebra el 59 aniversario de su independencia.
El gobierno español ha fletado un avión para trasladar los cuerpos de Antoni Cirera Pérez y Dolors Sánchez Rami, el matrimonio de jubilados catalanes muertos en el tiroteo y a la pareja de jóvenes valencianos Cristina Rubio y Juan Carlos Sánchez, que sobrevivió escondida durante 24 horas en el museo.
En el aparato también podrían partir los cadáveres de los colombianos Enrique Camelo y Myriam Martínez, hijo y esposa del general retirado José Arturo Camelo, que viajaba con ellos y resultó ileso. Las autoridades tunecinas han detenido ya a nueve personas, cinco por su presunta participación directa en la masacre y cuatro por supuestamente prestarles ayuda logística.
La acción ha sido reivindicada por el grupo autodenominado Estado Islámico, afincado en Siria e Irak.
