El Salvador espera repatriar pronto al náufrago cuya familia lo creía muerto

El Salvador espera repatriar pronto a José Salvador Alvarenga, un pescador salvadoreño que dice haber estado a la deriva más de un año en el Pacífico y cuya familia lo creía muerto porque desconocía su paradero desde hace ocho años, dijeron fuentes oficiales y la prensa.

Alvarenga, de 37 años, apareció la semana pasada en un arrecife de las islas Marshall y fue trasladado ayer a Majuro, la capital de esa nación del Pacífico Sur, donde fue dado de alta de un hospital y llevado a un alojamiento temporal a la espera de su repatriación.

La Cancillería salvadoreña está "dando toda la asistencia necesaria para que (Alvarenga) retorne al país al más corto plazo", declaró a los periodistas el vicecanciller para salvadoreños en el exterior, Juan José García.

"Todavía no tenemos una fecha" para la repatriación, que "dependerá mucho del estado de salud en que se encuentre el señor Alvarenga después de 13 meses de travesía por el océano" Pacífico, añadió García.

Alvarenga habló hoy por teléfono con su familia en El Salvador desde el Hospital de Majuro, dijo a Efe el médico Ron Mendoza, quien señaló que el superviviente sólo tiene las enzimas del hígado elevadas, un problema que vinculó a la inanición.

García explicó que se le otorgará a Alvarenga el pasaporte salvadoreño a través de la cónsul honoraria de El Salvador en Filipinas, María Josefina Bayont de Duarte.

El funcionario salvadoreño destacó "la plena colaboración del Gobierno de México" en este caso, ya que en principio se creyó que el náufrago era mexicano, pues salió de ese país en 2012.

Añadió que la Cancillería ya contactó con la familia de Alvarenga en la comunidad costera de Garita Palmera, departamento de Ahuachapán, fronterizo con Guatemala.

Los familiares de Alvarenga se han mostrado emocionados y sorprendidos porque sobrevivió, según publicó hoy la prensa salvadoreña, que ha dado amplia cobertura al caso.

"No sabíamos el paradero de nuestro hijo. Teníamos ocho años de no saber nada de él. Nosotros aquí en la casa pensábamos que estaba muerto. Gracias a mi Dios está con vida y que nos reencontraremos muy pronto", expresó al diario El Mundo la madre del pescador, María Julia Alvarenga, de 59 años.

El padre, José Ricardo Orellana, de 65 años, expresó por su parte al rotativo local La Prensa Gráfica que "con el poder de Dios" su "hijo ha vivido" tantos meses en el mar, y agradeció a "las buenas personas" que lo rescataron.

"Lloré al verlo en la computadora. No aguanté las lágrimas", relató Orellana a El Diario de Hoy, al referirse al momento en que vio las imágenes de su hijo en medios digitales.

Según sus familiares, Alvarenga, el tercero de cinco hijos, se fue hace más de 15 años para México atraído por la pesca de tiburones y sólo regresó en tres ocasiones, la última en 2007.

El pescador zarpó supuestamente de México a finales de 2012 en una expedición para pescar tiburones en aguas de El Salvador junto a un compañero que, según la versión del superviviente, murió unos meses después en alta mar.

El dúo partió en una embarcación de siete metros para un viaje que se torció por culpa de una tormenta que los alejó de la costa y los dejó a la deriva en el Pacífico.

El 30 de enero de 2014, el barco reapareció en un arrecife cerca de Ebon, un remoto atolón de las Islas Marshall, donde los lugareños encontraron a Alvarenga y tuvieron problemas para comunicarse con él porque solo hablaba español.

Las autoridades de las Islas Marshall enviaron un barco a Ebo para trasladarlo a Majuro.

Alvarenga manifestó que sobrevivió tantos meses en alta mar bebiendo la sangre de tortugas cuando le faltaba agua de lluvia y comiendo quelonios, aves y peces que cazaba con las manos.