El Gobierno turco prosigue su purga contra los supuestos golpistas

  • El excomandante de las Fuerzas Aéreas rechaza ser el líder de la asonada
  • 7.850 policías, más de 2.700 miembros de la judicatura y 100 militares han sido detenidos

El Gobierno turco del islamista AKPsiguió adelante con sus operativos en contra de supuestos elementos golpistas dentro del ejército, informaron hoy las emisoras y prensa locales.

Unos 1.800 policías de unidades especiales fueron enviados desde otras provincias a Estambul, el escenario más violento del fallido golpe militar del pasado viernes por la noche. Los agentes fueron desplazados a lugares estratégicos y críticos en la ciudad, la más grande del país.

Al mismo tiempo, el director de seguridad de Estambul, Mustafa Caliskan, dio la orden a sus agentes a derribar cualquier helicóptero no autorizado que sobrevuele Estambul.

La agencia de noticias semioficial Anadolu indicó hoy que el presidente, Recep Tayyip Erdogan, ha ordenado que aviones de combate F-16 patrullen el espacio aéreo de todo el país, especialmente en torno a Estambul. Mientras, dos camiones con municiones fueron enviados al aeropuerto internacional Atatürk de Estambul, junto con varios vehículos blindados de la policía.

Este lunes, unidades de la policía especial turca entraron en la Academia de la Fuerza Aérea turca en Yesilkoy, cerca de Estambul. El lugar fue rodeado por vehículos de la policía y camiones blindados con cañones de defensa antiaérea, que fueron colocados en la entrada principal de la Academia.

EL EXCOMANDANTE DE LA FUERZA AEREA NO ADMITE SER EL LIDER DE LA INTENTONA GOLPISTA

El general Akin Öztürk, excomandante de las Fuerzas Aéreas turcas y sospechoso de ser el líder del intento de derrocar al Gobierno, ha desmentido su participación en la asonada del pasado viernes e incluso ha afirmado que trató de detenerla, informa la emisora NTV. "No soy la persona que dirigió el golpe del 15 de julio de 2016. No sé quién planeó o dirigió este golpe", ha asegurado el militar en su declaración ante la Fiscalía, según ese canal.

Esa información contradice una anterior divulgada por la agencia de noticias semipública Anadolu, según la cual Öztürk había confesado intenciones golpistas.

Öztürk, detenido el sábado, fue trasladado hoy al juzgado, junto con otras dos decenas de generales, bajo la petición de prisión preventiva, apareciendo visiblemente desmejorado y con un vendaje en la oreja derecha. Anteriormente se había informado de que el excomandante había negado toda implicación en el golpe.

Según NTV, Öztürk afirmó que el día de la asonada tenía previsto ir a la boda de la hija de un amigo y que tuvo que cancelar ese plan por motivos de trabajo.

Ante el fiscal, explicó que estuvo siguiendo los movimientos militares a través de la televisión desde la base de Akinci. "El comandante de las Fuerzas Aéreas me dijo que hiciera algo para que los cazas (rebeldes) no hicieran esos vuelos rasantes. En cinco minutos me presenté ante el jefe del Estado Mayor, que estaba en la base", explicó.

El militar de 64 años aseguró que trató de evitar el intento de golpe y que el jefe del Estado Mayor "es testigo de ello".

Necdet Özel, que fue hasta el pasado agosto jefe del Estado Mayor, aseguró hoy a los medios turcos que nunca observó que Öztürk tuviera intenciones golpistas ya que, de haber sido así, lo habría destituido.

La Policía ha detenido a 103 generales y almirantes de las Fuerzas Armadas turcas bajo la acusación de haber estado involucrado en la intentona del golpe militar del viernes pasado. La cifra supone casi un tercio de los 356 generales y almirantes que componen la cúpula de las Fuerzas Armadas turcas. Entre ellos se hallan los comandantes del 2º y 3º Ejército de las fuerzas terrestres.

SUSPENDIDOS 8.513 POLICÍAS

La dirección general de Seguridad de Turquía anunció que ha suspendido a 8.513 agentes por su supuesta relación con el fallido intento golpe militar del pasado viernes, informa hoy el diario Hürriyet en su versión electrónica. "La dirección general de Seguridad inició un operativo anoche. En toda Turquía han sido suspendido 7.850 policías, entre ellos oficiales", señala el diario.

El primer ministro turco, Binali Yildirim, señaló hoy en un discurso televisado que hasta el momento han sido detenidas más de 7.500 personas tras el fallido golpe de Estado del pasado viernes, entre ellas unos 6.000 militares, 100 policías, 755 jueces y fiscales, así como 650 civiles.

Según el último balance, en total murieron 208 personas que se resistieron al golpe, entre ellos tres soldados, 60 policías y 145 civiles, mientras que 1.491 personas resultaron heridas. Además, fallecieron 24 soldados golpistas y 50 resultaron heridos, precisó el primer ministro, quien volvió a responsabilizar del golpe al predicador Fethullah Gülen.

Al mismo tiempo, han surgido voces que piden la reintroducción de la pena de muerte en Turquía -abolida en 2004- lo que Erdogan ha anunciado querer negociar con la oposición.

LISTA DE JUECES PARA DEPURAR

El comisario europeo de Política de Vecindad y Ampliación, Johannes Hahn, afirmó que las autoridades turcas tenían preparada una lista de jueces a los que depurar como represalia tras el intento de golpe de Estado en la noche del pasado viernes al sábado. "Estoy muy preocupado. Es exactamente lo que nos temíamos", indicó Hahn a su llegada al Consejo de Ministros de Exteriores de la Unión Europea (UE), en el que se abordará la situación en Turquía.

El comisario austríaco recordó que, tras el levantamiento de un sector de los militares turcos, la UE pidió que las consecuencias estuvieran "en línea con los estándares internacionales del Estado de derecho". "Y lo que vemos no se cumple realmente", apuntó.

Preguntado por si las autoridades turcas están sacando ventaja de la situación, Han respondió: "Al menos, algo ha sido preparado". "Las listas, que ya estaban disponibles justo después de este acontecimiento, indican que algo estaba preparado, que en cierto momento tendrían que ser utilizadas", consideró.

El ministro turco de Justicia, Bekir Bozdag, informó hoy de que se ha detenido por el momento a unas 6.000 personas tras el fallido golpe, de las cuales 2.839 son militares, entre ellos decenas de generales, mientras que más de 2.700 jueces han sido destituidos.

REACCIONES INTERNACIONALES

"Fuimos los primeros, y yo fui personalmente la primera durante esa trágica noche (del viernes), en decir que las instituciones democráticas tenían que ser protegidas", dijo a su llegada al Consejo la alta representante de la UE para la Política Exterior, Federica Mogherini. En su opinión, "el Estado de derecho tiene que protegerse en el país, no hay excusa para apartar al país de eso".

El ministro británico de Exteriores, Boris Johnson, señaló que "es muy importante, en vistas del golpe fallido, que veamos moderación de todas las partes".

El titular francés, Jean-Marc Ayrault, afirmó que "no podemos aceptar que los militares tomen un poder que ha sido elegido por los ciudadanos, no podemos aceptar la dictadura militar". "Al mismo tiempo, hay que estar vigilantes para que las autoridades turcas no pongan en marcha un sistema político que les aleje de la democracia", dijo.

Según Ayrault, "ha habido muchos progresos y reformas estos últimos años, el peligro sería volver atrás en cuanto a democracia" y "volver a un sistema autoritario".

El ministro belga Didier Reynders consideró que la posibilidad de la vuelta de la pena de muerte en Turquía "supone un problema para la UE" y "no es aceptable". "Reabrir hoy el debate (sobre la pena de muerte) no va a simplificar la relación con la UE", indicó Reynders, que agregó que "ya había cosas que nos preocupaban".

Declaró que los países europeos están "muy preocupados" ante esa perspectiva y que es "necesario e indispensable condenar este golpe, pero también actuar de manera proporcional".

CONFLICTO CON GRECIA POR EXTRADICCIÓN DE MILITARES

El Gobierno griego quiere evitar un conflicto diplomático con Turquía tramitando lo antes posible la extradición de los ocho oficiales del Ejército que huyeron el sábado a Grecia en helicóptero. El Ejecutivo espera que se pueda aplicar una 'vía rápida' para rechazar el asilo a los oficiales escapados y que así puedan ser devueltos a su país lo ante posible, especificaron los medios griegos, para evitar una consiguiente crisis con el país vecino.

Los ocho hombres fueron conducidos hoy ante el juez instructor que deliberará sobre cargos por violación del espacio aéreo y entrada ilegal en el país que presentó la fiscalía de la ciudad griega de Alexandrúpolis. Solo tras concluir este proceso comenzará el que decidirá sobre sus demandas de asilo, lo que podría tomar semanas.

Incluso aunque la demanda de asilo sea rechazada, los oficiales podrían apelar la decisión al Tribunal Supremo griego, cuyo pronunciamiento podría retrasarse también semanas o meses. Además la posibilidad, insinuada por el propio presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, de que se restablezca la pena de muerte en Turquía complicaría que se diera luz verde a dicha extradición.

Los ocho imputados sostienen que no estuvieron implicados en el golpe de Estado e incluso aseguran que tan solo supieron de la asonada al hablar por teléfono con sus familiares. Los oficiales dicen que sus órdenes eran "transportar a heridos en los cuatro helicópteros que estaban operando".

En un momento dado tres de los aparatos fueron alcanzados por disparos de la policía por lo que decidieron embarcar en el único que no había sufrido daños. Los ocho militares quisieran volver a su país para reunirse con sus familias, pero temen por sus vidas, ya que han sido acusados de participar en el golpe, y por ese motivo han decidido solicitar asilo político en Grecia.

MARGALLO ALERTA SOBRE EL AUTORITARISMO

El ministro español de Exteriores en funciones, José Manuel García-Margallo, advirtió hoy de que una deriva autoritaria de las autoridades de Turquía "dificultaría enormemente" las relaciones entre ese país y la Unión Europea (UE). "La UE se basa en una serie de valores y de principios compartidos. El Estado de derecho y la separación de poderes forman parte de ese abanico del conjunto de principios o valores", recordó García-Margallo ante la prensa a su llegada a un Consejo de Ministros de Exteriores de la UE.

"Es obvio que cualquier ruptura, cualquier violación de esos principios dificultaría enormemente las relaciones entre la UE y Turquía y tendría consecuencias prácticas importantes", continuó. Se refirió a que la UE "tiene un acuerdo con Turquía para la atención a los refugiados que tiene una contrapartida, que es la liberalización de los visados", la cual "a su vez está condicionada al respeto a los principios y valores a los que me he referido".

Según dijo, hoy los ministros de la UE darán el mensaje de que "obviamente todos estamos en contra de un golpe de Estado que rompe la institucionalidad turca, pero pedimos también que el Gobierno turco respete el Estado de derecho y los derechos humanos y procure no dividir a la sociedad turca". "Creo que ese es un mensaje que será compartido por todos nosotros y fácilmente comprensible por el Gobierno turco", consideró.

Por otra parte, dijo que "no hay ninguna novedad alarmante" sobre el estado de las tropas españolas desplegadas en el marco de la OTAN en la base aérea de Incirlik, en Adana -a unos 120 kilómetros de la frontera con Siria, y que estuvo clausurada por unas horas tras el intento golpista-, donde garantizan la seguridad aérea con una batería antimisiles Patriot. "No hay ninguna novedad en ese tema, es más, no hay ninguna novedad respecto de ningún español", confirmó, y recordó que "se produjeron muchísimas llamadas a lo largo de estos días; todas han sido atendidas, se ha restablecido la normalidad en Estambul". "En estos momentos no hay noticias ni de muertos, ni de heridos, ni de detenidos en Turquía", concluyó.

PENA DE MUERTE

La secretaria del PSOE para la UE, Iratxe García, advirtió de que si Turquía reinstaurara la pena de muerte "se tendrían que romper las negociaciones del proceso de adhesión", pues "es imposibe que un país que trate de acceder tenga aprobada la pena de muerte".

García constató "motivos para la preocupación" en Turquía y dijo que espera medidas por parte de la UE para "establecer claramente las normas" que tienen que regir su relación con Turquía.

La dirigente socialista criticó que el acuerdo sobre los refugiados con Turquía "es consecuencia del fracaso de la UE para gestionar esta situacion", y ahora nos encontramos que miles de refugiados pierden la vida saliendo de Libia.

García instó a la UE a "mostrar fortaleza" ante Turquía porque, pese a su importancia estratégica, hay que tener "claras las reglas del respeto democrático e impedir la deriva de lo que parece que está ocurriendo" en ese país.

En ese sentido, dijo que las detenciones pueden revelar una falta de respeto a las reglas democráticas, por lo que "tiene que haber una vigilancia muy estrecha de lo que está ocurriendo" por parte de la UE.