El Gobierno de Colombia y las FARC acuerdan el alto el fuego definitivo

  • Se dará a conocer en La Habana en un acto oficial de alto nivel al que acudirá el presidente Santos
  • El acuerdo incluye la dejación de armas por parte de las FARC y queda por cerrar la integración

El Gobierno de Colombia y las FARC anunciaron hoy un acuerdo para el cese al fuego bilateral y definitivo y otros aspectos sobre el fin del conflicto, cuyo contenido se dará a conocer mañana en La Habana en un acto oficial de alto nivel al que acudirá el presidente Juan Manuel Santos.

"Hemos llegado con éxito al Acuerdo para el Cese al Fuego y de Hostilidades Bilateral y Definitivo", indicaron los negociadores del Gobierno y de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en un comunicado conjunto leído en la capital cubana por el guerrillero Luis Alberto Albán, alias "Marco León Calarcá", y Marcela Durán, jefa de comunicación del equipo de paz del Gobierno.

Cerca de 200.000 muertos, 45.000 desaparecidos y seis millones de desplazados, es el resultado de 50 años de levantamiento armado en las selvas de Colombia.

El acuerdo incluye otros aspectos fundamentales para el fin del conflicto en Colombia como la dejación de armas por parte de la guerrilla, las garantías de seguridad, lucha contra el paramilitarismo y sus redes de apoyo y la persecución de las conductas criminales que amenacen la aplicación de los acuerdos y la construcción de la paz.

Aunque el texto y los detalles no se conocerán hasta mañana jueves, el acuerdo consiste en una "hoja de ruta" o cronograma sobre los pasos y condiciones para hacer efectivo ese cese el fuego bilateral y definitivo, cuya puesta en vigor, por tanto, no será inmediata, de acuerdo a fuentes cercanas a la mesa de negociación.

Quedan por cerrar además otros aspectos relativos al punto sobre el "Fin del Conflicto", como el plan de reintegración de los guerrilleros, así como el capítulo previsto en la agenda de los diálogos sobre la aplicación y refrendación de los acuerdos.

ACTOS EN LA HABANA

En cualquier caso, se trata de un acuerdo fundamental para despejar el camino hacia la paz en Colombia y por ello se dará a conocer mañana jueves en La Habana, con un evento muy destacado presidido por Juan Manuel Santos y Rodrigo Londoño Echeverri "Timochenko", el líder máximo de las FARC, junto al presidente de Cuba, Raúl Castro, y el canciller de Noruega, Borge Brende, los dos países garantes del proceso de paz.

También viajarán a La Habana para ese acto los presidentes de Venezuela y Chile, Nicolás Maduro y Michelle Bachelet, respectivamente cuyos países han actuado como acompañantes de los diálogos de paz.

Como invitado especial, asistirá el secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-Moon, acompañado de los presidentes del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas y el de la Asamblea General.

El grupo de personalidades internacionales que estarán presentes en ese acto lo completan el presidente de República Dominicana, Danilo Medina, como actual responsable pro témpore de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y del Caribe (Celac); el presidente de El Salvador, Salvador Sánchez Cerén, y los enviados especiales de Estados Unidos y la Unión Europea en el proceso de paz, Bernie Aronson y Eamon Gilmore.

Este sustancial avance en los diálogos colombianos llega tres meses después de que las partes no lograran cumplir con la fecha del 23 de marzo de 2016 para la firma de la paz, anunciada en septiembre de 2015 en La Habana por Santos y "Timochenko", cuando se logró cerrar el acuerdo sobre la justicia transicional para los responsables del conflicto.

El acuerdo en torno al cese el fuego bilateral y definitivo despeja ahora el camino para la posterior firma de un acuerdo definitivo de paz.

Hace unos días, el presidente de Colombia consideró que las negociaciones con la guerrilla podrían concluir el próximo 20 julio, una fecha significativa al ser el día en que se conmemora la independencia del país.

Desde que en noviembre de 2012 comenzaron las conversaciones de paz entre el Gobierno de Colombia y la guerrilla de las FARC -que tienen su sede permanente en La Habana- las partes han llegado acuerdos parciales sobre la cuestión de la tierra, participación política, erradicación de cultivos ilícitos y el reconocimiento y reparación de las casi ocho millones de víctimas que ha dejado el conflicto en su más de medio siglo de historia.