El Consejo de Seguridad estudiará enviar una misión de pacificación a Malí

mali_4_soldados
mali_4_soldados |Archivo

El Consejo de Seguridad de Naciones Unidas discutirá pronto el envío de una misión de pacificación a Malí, donde tropas africanas y francesas ayudan a las malienses a expulsar del norte a los grupos islamistas, según han informado este miércoles fuentes diplomáticas.

"Cada vez se habla más de enviar una misión de pacificación (a Malí)", ha dicho un diplomático occidental. Otro diplomático y un funcionario de la ONU han confirmado esta versión y han apuntado que las discusiones podrían comenzar en unos días.

Aunque el debate se encuentra todavía en una fase inicial, las fuentes diplomáticas apuntan a que la misión de pacificación podría tener entre 3.000 y 5.000 efectivos.

La idea surgió por primera vez la semana pasada, por boca de la embajadora estadounidense en la ONU, Susan Rice. Días después, el primer ministro francés, Jean-Marc Ayrult, propuso el "rápido" despliegue de observadores internacionales que supervisen el cumplimiento de los Derechos Humanos en Malí.

La alternativa al despliegue de 'cascos azules' de la ONU es una misión de pacificación liderada por la Unión Africana (UA), aunque con apoyo logístico de la organización internacional, como en Somalia.

Las fuentes han indicado que una misión de pacificación de la ONU daría ciertas ventajas a la fuerza internacional, ya que las decisiones sobre el número y la nacionalidad de los efectivos sería más fácil y las cuestiones sobre financiación estarían más claras.

En cualquier caso, las fuentes han señalado que todavía es pronto para hablar de una misión de pacificación. "Todavía no hay una paz que mantener, estamos en la fase de conseguir y asegurar la paz", han explicado.

El pasado mes de diciembre, el Consejo de Seguridad autorizó la creación de la AFISMA, una fuerza internacional dotada con unos 3.000 efectivos que se desplegará el próximo mes de septiembre para ayudar a las tropas malienses a expulsar a los grupos islamistas.

No obstante, debido a las dificultades logísticas, Francia, a petición del Gobierno de Malí, tomó la iniciativa el pasado 11 de enero, iniciando la intervención militar en el país africano. En total, ha desplegado unos 2.500 efectivos.

Desde entonces, a las tropas francesas se han sumado las de la Misión Internacional de Apoyo a Malí (MISMA) --principalmente de los países de la Comunidad Económica de Estados de África Occidental (CEDEAO)-- que alcanzará los 8.000 efectivos.

Las tropas francesas y malienses han llevado a cabo operativos aéreos y terrestres para proteger Bamako y recuperar las ciudades de Konna, Diabaly, Gao, Tombuctú y Kidal siendo estas tres últimas las conquistas más importantes.

CRISIS POLÍTICA

La crisis política en Malí se desató el pasado mes de marzo, cuando un nutrido grupo de militares descontentos por la falta de recursos suministrados por el Gobierno para combatir al Movimiento Nacional de Liberación del Azawad (MNLA) en el norte dio un golpe de Estado.

Aprovechando el caos institucional, los rebeldes tuareg se hicieron con el control de las tres regiones que forman el Azawad --Tombuctú, Kidal y Gao-- y proclamaron unilateralmente su independencia, aunque este movimiento no contó con el reconocimiento de la comunidad internacional.

Sin embargo, los grupos islamistas presentes en el norte de Malí --Al Qaeda del Magreb Islámico (AQMI), el Movimiento de Unidad para la Yihad en África Occidental (MUYAO) y Ansar Dine--, rápidamente expulsaron al MNLA del Azawad, donde, desde entonces, imponen la 'sharia'.