EEUU confirma que negociará con Rusia un alto el fuego en Alepo

  • Siguen los disparos de artillería en distintas partes de Alepo mientras Al Asad da por hecho el triunfo y los rebeldes descartan rendirse
  • Moscú asegura que las fuerzas gubernamentales sirias han suspendido sus ataques para permitir la salida de civiles

Los disparos de cohetes y de artillería continuaron la pasada madrugada en distintas partes de la ciudad siria de Alepo, pese al anuncio ruso de que el ejército sirio había suspendido sus operaciones en la urbe, informó este viernes el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.

Las fuerzas gubernamentales abrieron fuego de artillería contra los barrios de Al Firdús, Al Kalasa, Al Mugair, Bustán al Qasr, Al Kalasa, Al Zabdie y Al Mashad, controlados por la oposición y situados en la parte oriental de la localidad.

Además, aviones de guerra no identificados dispararon con armas automáticas contra los distritos de Al Salhín, Bustán al Qasr, Al Kalasa y Al Maadi, en poder de los rebeldes.

Por su parte, los grupos insurgentes e islámicos lanzaron cohetes contra áreas en manos de las autoridades en Seif al Daula, Al Azamiya y la zona de la rotonda de Al Itfaia, en el oeste. El Observatorio agregó que aviones de combate bombardearon en las últimas horas lugares de la periferia sur de Alepo.

Hasta la pasada medianoche, prosiguieron los enfrentamientos en algunas partes del este de la población. Ayer, jueves, el Observatorio afirmó que los bombardeos se suspendieron al atardecer en el este de Alepo, aunque continuaban los disparos de artillería.

El ministro ruso de Asuntos Exteriores, Serguéi Lavrov, anunció también ayer que el ejército sirio suspendió su ofensiva en la mitad oriental de la ciudad para facilitar la mayor evacuación hasta el momento de civiles de esa parte de la urbe.

RUSIA Y EEUU BUSCAN UN ACUERDO

Asimismo, señaló que acordó con el secretario de Estado de EEUU, John Kerry, la reanudación de las consultas sobre la salida de todos los combatientes del este de Alepo.

Por el momento, las fuerzas armadas sirias no han confirmado la suspensión de las operaciones castrenses.

EEUU asegura que las negociaciones para lograr un alto el fuego en la ciudad siria de Alepo siguen en marcha, después de que Moscú asegurara que las fuerzas gubernamentales sirias habían suspendido sus ataques para permitir la salida de civiles.

La portavoz del Departamento de Estado de EEUU Elizabeth Trudeau confirmó que el titular de esa cartera, John Kerry, y el ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, hablaron hoy por teléfono para acordar "continuar los contactos para establecer un marco para un alto el fuego que permita el envío de ayuda humanitaria a Alepo".

En una rueda de prensa, Trudeau también confirmó que Kerry y Lavrov se reunirán este fin de semana en Ginebra para tratar asuntos "técnicos" relativos al alto el fuego en Alepo, escenario de una grave crisis humanitaria tras más de cinco años de guerra civil.

El ministro ruso de Exteriores adelantó que las fuerzas armadas sirias suspendieron hoy su ofensiva en la mitad oriental de Alepo para facilitar la mayor evacuación hasta el momento de civiles, que calcula que serán unos 8.000. Asimismo, reveló que ha acordado con Kerry la reanudación de las consultas sobre la salida de todos los combatientes contra el régimen del líder sirio, Bachar al Asad, del este de Alepo.

La portavoz aseguró que los esfuerzos de Estados Unidos se han centrado en "rebajar la escalada de violencia" y asegurarse de que la ayuda humanitaria llega a los civiles que aún permanecen en la ciudad, al tiempo que no quiso comentar si Washington ha constatado el alto el fuego de las fuerzas sirias.

El presidente sirio, Bachar al Asad, ha dado por hecho un triunfo del ejército en la ciudad de Alepo (norte), aunque los rebeldes se resisten a rendirse pese a que han perdido la mayor parte del este de la urbe.

En una entrevista publicada hoy por el diario estatal "Al Watan", Al Asad se atrevió ya a hablar del periodo que vendrá después de la conquista de la población, la mayor del norte de Siria, aunque los combates todavía prosiguen en su interior.

Para el mandatario, la toma de Alepo no supondrá el fin del conflicto en el país, que dura más de cinco años. "Para ser realistas, no significa el fin de la guerra en Siria, sino una estación grande hacia el final", consideró Al Asad, quien reconoció que nunca pensó en dejar ninguna zona sin "liberar".

El jefe de Estado auguró que la contienda "no acabará hasta la eliminación total del terrorismo": "Los terroristas están localizados en otras áreas, incluso si terminamos en Alepo, continuaremos la guerra contra ellos", aseguró.

Al Asad descartó una nueva tregua en la urbe, porque, afirmó, beneficiaría a los "terroristas", ya que les daría un respiro y les permitiría reagruparse.