Donald Trump no descarta presentarse como independiente si no resulta nominado

  • Los republicanos culpan a Obama de debilitar a EEUU y alertan sobre Rusia y China
  • Los candidatos republicanos prometen bajar impuestos y eliminar reforma sanitaria

El magnate inmobiliario Donald Trump no descartó, en el debate televisado de las primarias del Partido Republicano, presentarse como candidato independiente por un tercer partido si no es designado por los conservadores para optar a la Casa Blanca en los comicios de 2016.

"Si soy nominado (en el Partido Republicano), no me presentaré como independiente", contestó Trump de forma ambigua a la pregunta de los moderadores sobre si los diez aspirantes presentes descartaban una candidatura independiente.

Además, Trump, interrogado por algunos de sus comentarios despectivos hacia las mujeres, respondió que "el gran problema de EE.UU. es la corrección política", lo que desencadenó aplausos entre el público presente en el debate, y añadió que él "no tiene tiempo" para ser políticamente correcto.

"No tengo tiempo para ser siempre políticamente correcto, este país tiene serios problemas. Ya no ganamos. Perdemos contra China, contra México, contra todo el mundo en temas comerciales. Yo digo lo que digo y, si no te gusta, lo siento", afirmó Trump.

Trump fue replicado por el senador por Kentucky Rand Paul, que le acusó de "estar acostumbrado a comprar políticos", y recordó que el magnate fue en el pasado donante de las campañas de los demócratas Bill y Hillary Clinton. El primer debate entre los diez aspirantes mejor situados para ser el candidato republicano en las elecciones presidenciales de 2016 empezó hoy en Cleveland (Ohio) en medio de una gran expectación mediática.

El debate comenzó a las 21.00 horas de la costa este de EE.UU. (01.00 GMT del viernes) en el pabellón Quicken Loans Arena, donde los diez aspirantes se situaron ante un atril de acuerdo con el orden en el que aparecen en las encuestas, con Trump, que lidera todos los sondeos, en el centro.

CULPAN A OBAMA DE DEBILITAR A EEUU Y ALERTAN SOBRE RUSIA Y CHINA

Los precandidatos republicanos a la Casa Blanca culparon al presidente de EEUU, Barack Obama, de debilitar al país con su política exterior y alertaron de las amenazas que plantean China y Rusia, durante su primer debate televisado y transmitido por la cadena Fox.

En la sección del debate centrada en la política exterior de Obama se escucharon algunas de las frases más comentadas de la noche. "Los gobiernos ruso y chino saben más del servidor de correo electrónico de Hillary Clinton que el Congreso de Estados Unidos", ironizó el gobernador de Wisconsin, Scott Walker.

Walker aludió así a la polémica en torno a Clinton, la aspirante demócrata a la Casa Blanca favorita en los sondeos, por haber usado un correo electrónico personal para asuntos oficiales cuando era secretaria de Estado. También aludió a China y Rusia el senador por Texas Ted Cruz, quien dijo que ambos países están en una "ciberguerra" con EEUU.

Por su parte, el también senador Rand Paul (Kentucky) sostuvo que no tiene sentido "tomar prestado dinero de China" para enviarlo luego a todos los países a los que EEUU da ayuda financiera. Mientras, el neurocirujano Ben Carson alertó de que las Fuerzas Armadas se han debilitado bajo el mandato de Obama y, en paralelo, los "enemigos" de EEUU se han hecho más fuertes.

El gobernador de Nueva Jersey, Chris Christie, se pronunció en un sentido muy parecido y urgió a "fortalecer" a los militares, además de a seguir considerando a Israel como "una prioridad" en política exterior. "Las Fuerzas Armadas no son un experimento social, se trata de matar gente y romper cosas", comentó el exgobernador de Arkansas Mike Huckabee al ser preguntado sobre los militares transexuales.

El magnate Donald Trump también cargó contra la política exterior de Obama. "Tenemos un presidente que no tiene ni idea de lo que hace", subrayó.

PROMETEN BAJAR IMPUESTOS Y ELIMINAR REFORMA SANITARIA

La mayoría de los precandidatos republicanos que participan en el primer debate televisivo en EEUU coincidieron en que, si llegan a la Casa Blanca, su receta para hacer crecer la economía sería eliminar la reforma sanitaria del presidente Barack Obama y aplicar rebajas de impuestos.

El senador Marco Rubio prometió revocar esa reforma sanitaria, conocida como "Obamacare", y también la ley Dodd-Frank de reforma del sistema financiero promulgada por Obama, de la que dijo que está "destripando" a los pequeños bancos.

El gobernador de Wisconsin, Scott Walker, prometió igualmente anular la "Obamacare" y también aplicar "impuestos más bajos", al defender el éxito de sus políticas en el estado que gobierna. Mientras, el gobernador de Ohio, John Kasich, comentó que "el crecimiento económico es la clave de todo", al igual que "recortar impuestos" y "equilibrar presupuestos".

Por su parte, el gobernador de Nueva Jersey, Chris Christie, señaló que uno de los principales problemas de EE.UU. es que el sistema del Seguro Social "está roto" y hace falta "un líder fuerte que diga la verdad y lo arregle".

TRUMP Y RUBIO PIDEN MURO EN FRONTERA SUR Y BUSH ELIMINAR "CIUDADES SANTUARIO"

Donald Trump y Marco Rubio insistieron en la necesidad de construir un muro en la frontera de EE.UU. con México, mientras que Jeb Bush abogó por eliminar las "ciudades santuario", durante el primer debate televisado entre los aspirantes republicanos a la Casa Blanca.

"Si no fuera por mí, no estaríamos ni siquiera hablando de inmigración ilegal", respondió el magnate Trump al ser preguntado por uno de los moderadores del debate, organizado por la cadena Fox, sobre los polémicos comentarios en los que calificó de "violadores" y "criminales" a los inmigrantes mexicanos.

"Tenemos que construir un muro y tiene que ser rápidamente", enfatizó Trump, quien volvió a culpar a la prensa de haber distorsionado sus declaraciones sobre los mexicanos.

El senador Rubio coincidió con Trump en que hay que construir un muro en la frontera sur, y dijo que entiende la "frustración" de muchos estadounidenses ante la inmigración ilegal.Según Rubio, de origen cubano, la "mayoría" de los inmigrantes que llegan ilegalmente a EE.UU. "no vienen de México", sino de países centroamericanos como Guatemala u Honduras.

Por su parte, Bush, exgobernador de Florida, comentó que "hay que controlar la frontera", y abogó por eliminar las llamadas "ciudades santuario", en las que las autoridades locales protegen de la deportación a inmigrantes indocumentados y donde, según dijo, "la gente está muriendo". Bush también se mostró contrario a una "amnistía" para los inmigrantes indocumentados, al igual que el senador Ted Cruz.