Diecisiete civiles y 13 soldados mueren en los enfrentamientos en el este de Ucrania

  • La Guardia Nacional toma la ciudad de Lisichansk, en el este de Ucrania
Soldados ucranianos
Soldados ucranianos |Telemadrid

Al menos 17 civiles y 13 soldados han muerto en las últimas 24 horas como resultado de los combates entre las fuerzas ucranianas y los rebeldes prorrusos en el este de Ucrania, informaron fuentes oficiales ucranianas.

En la región de Donetsk, donde los combates han llegado a la capital regional, con cerca de un millón de habitantes antes del inicio del conflicto, han muerto 14 personas y otras 13 han resultado heridas, según el Gobierno regional, leal a Kiev.

En Lugansk, escenario de los combates más intensos desde hace varias semanas y sometida a diario al fuego de artillería del que se acusan, han muerto tres civiles y otros siete han resultado heridos, según la asamblea municipal de esa ciudad habitada por medio millón de habitantes antes de la guerra.

Trece soldados ucranianos perdieron la vida en combate en las últimas 24 horas y elevaron a 325 el total de fallecidos en las filas ucranianas desde el inicio de la operación militar lanzada por Kiev hace tres meses para recuperar el control de los territorios tomados por los milicianos prorrusos.

"En todo el periodo de la operación antiterrorista han muerto 325 militares ucranianos y otros 1.232 han recibido heridas de diversa consideración", anunció en rueda de prensa el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional y Defensa de Ucrania, Andréi Lisenko.

LA GUARDIA NACIONAL TOMA LISCHANSK

Efectivos de la Guardia Nacional ucraniana tomaron la ciudad de Lischansk, en el este de Ucrania, informó el mando de las milicias separatistas prorrusas que actúan en la autoproclamada república popular de Lugansk. "Lisichansk fue capturada por la Guardia Nacional. Los milicianos consiguieron salir del cerco", dijo a la agencia rusa Interfax un representante del estado mayor de los separatistas.

La ciudad, de cerca de 100.000 habitantes antes del estallido del conflicto, se encuentra a 90 kilómetros al noroeste de Lugansk, la capital la región homónima y uno de los principales reductos de los secesionistas prorrusos. El portavoz del mando rebelde denunció que antes de entrar en Lisichansk, las fuerzas gubernamentales ucranianas castigaron duramente la ciudad con fuego de artillería.

"La ciudad está al borde de una catástrofe humanitaria. No hay agua ni luz ni gas. Sus habitantes están tratando de abandonarla los más rápido posible", agregó. Desde hace varios días las tropas gubernamentales ucranianas han intensificado su ofensiva contra la posiciones de los separatistas, que se han replegado de varias localidades.