Bélgica bate el récord mundial de días sin Gobierno tras las elecciones

  • Los ciudadanos se movilizan y convocan protestas simultáneas en diferentes puntos del país

Bélgica bate este jueves el récord mundial de días (249) sin formar Gobierno tras unas elecciones generales, que hasta ahora tenía Irak, por lo que se han convocado protestas ciudadanas simultáneas en varios puntos del país. La jornada de movilizaciones, bautizada como la "Revolución de las Patatas Fritas" (en referencia a uno de los iconos gastronómicos belgas), ha sido organizada por una treintena de asociaciones de estudiantes para expresar el hartazgo con la clase política y oponerse a la hipotética división del país.

Varios miles de estudiantes se han concentrado en varias ciudades de Bélgica para criticar, en un ambiente festivo, el récord mundial de días sin gobierno. Las manifestaciones se producen después de que anoche el Rey Alberto II aceptase prolongar hasta el próximo 1 de marzo la misión de mediación en la crisis política que desempeña el liberal francófono Didier Reynders.

Reynders constató que "existe voluntad de negociación", en una rueda de prensa ofrecida tras su encuentro con el monarca, en la que también recalcó la necesidad de "reconstruir el clima de confianza" en la clase política que, en su opinión, "ha desaparecido claramente".

Según el mediador, para lograr cerrar un acuerdo sobre la coalición de Gobierno es imprescindible avanzar en paralelo sobre cuestiones como la separación distrito electoral de la capital y su periferia (Bruselas-Halle-Vilvoorde) y las garantías lingüísticas a los francófonos de esa zona, a la vez que se discute una nueva financiación de las regiones y del Ejecutivo federal. "No es posible avanzar en la composición institucional si no debatimos a la vez ciertas políticas importantes a nivel federal", destacó.

La prensa belga se hace eco de este funesto récord, ironizando con la dificultad del pequeño país para alcanzar otro tipo de metas. "Ni el hartazgo ciudadano, ni la depresión que cae sobre los electores, políticos, periodistas, prisioneros atolondrados, exasperados, asqueados de este encarcelamiento mental, han hecho entrar en razón a los negociadores que se pelean sin descanso. En el día 249, ya ni fingen", escribe el diario Le Soir.

En Bruselas, entre 1.100 personas, según la policía local, y 2.500, según los organizadores, han participado en el acto, celebrado frente al Palacio de Justicia para marcar los 250 días sin gobierno que cumple el país este viernes. Los asistentes han enarbolado banderas belgas y han coreado canciones populares con letras readaptadas a la situación política.

Sobre un escenario han ido desfilando jóvenes que, dirigiéndose a los presentes en francés y en neerlandés, han expresado el hartazgo con la clase política y han defendido la unidad del país.

La iniciativa se suma a una serie de actividades organizadas por los universitarios del país en Gante, Amberes, Lieja y Lovaina para lanzar, a través de la fiesta, un mensaje a favor de un acuerdo y en contra de una hipotética división del país entre flamencos y francófonos.

En Gante, varias decenas de estudiantes se quedaron en ropa interior en una plaza del centro de la ciudad.

Solo en la pequeña ciudad universitaria de Lovaina la Nueva, más de 1.500 personas urgieron a los políticos a formar cuanto antes gobierno.

La caída del Gobierno en Bélgica se produjo en abril del año pasado debido a la retirada del partido liberal flamenco Open VLD de la coalición gubernamental por discrepancias insalvables sobre el régimen lingüístico en la periferia de Bruselas.

El entonces primer ministro, el democristiano flamenco Yves Leterme, presentó su dimisión al rey, quien convocó elecciones anticipadas para junio.

En los comicios, ninguna formación consiguió una mayoría suficiente para gobernar en solitario, como es habitual en Bélgica.

Desde entonces, tampoco se ha logrado alcanzar un acuerdo para la formación de un nuevo Ejecutivo, por lo que el país continúa dirigido por un Gobierno en funciones, que debido a sus competencias limitadas no ha podido avanzar en una amplio número de cuestiones de interés nacional.