Un hombre de Michigan, en Estados Unidos, se enfrenta a los cargos de abuso a menores y delito grave por dejar conducir a su hija de tan sólo 9 años. El padre, declaró haber dejado conducir a la pequeña porque él iba borracho. Las cámaras de seguridad de una gasolinera, lo ponen en evidencia, al grabarlo tambaleándose dentro de la misma, ante la antenta mirada de su hija.
Parece ser que no es la única vez que la niña se pone al volante, ya que cuando fue interrogada por la policía aseguró ser muy buena conductora.
