La UE, aliviada por Austria, analiza el referéndum italiano en clave interna

La Comisión Europea (CE) respiró hoy aliviada tras la victoria europeísta en las elecciones presidenciales austríacas del domingo, al tiempo que consideró un asunto interno la victoria del "no" en el referéndum italiano, que provocó la dimisión del primer ministro, Matteo Renzi. "El referéndum en Italia era sobre un cambio en la Constitución italiana, no sobre Europa" declaró el portavoz jefe de la CE, Margaritis Schinas, que trasladó a los partidos e instituciones transalpinas la responsabilidad de ofrecer "respuestas políticas convincentes" sin alejarse de una "oleada de reformas" que "debe continuar".

La victoria del "no", con el 59,11 % de los votos frente al 40,89 % del "sí", añade incertidumbre a la tercera economía de la zona euro, un país acostumbrado a gobiernos de corta duración -63 en los últimos 70 años- que atraviesa actualmente un momento de inestabilidad financiera y tímido crecimiento económico.

Italia cerrará este año con un avance del 0,8 % del PIB, según la última estimación de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), y registrará en 2017 un incremento del 0,9 %, en base a los pronósticos de la Comisión Europea.

El conciso mensaje del Ejecutivo comunitario se alinea con el del resto de instituciones de la Unión Europea (UE) y Estados miembros de la UE, como los ministros de Finanzas de la zona euro congregados hoy en Bruselas en una reunión del Eurogrupo.

El titular francés, Michael Sapin, subrayó que la consulta italiana no versaba "sobre Europa, sobre la política europea o sobre el lugar de Italia en Europa". "Italia es un país profundamente europeo, muy ligado a la construcción europea. Es un país sólido", declaró el ministro francés, que también intentó separar de la percepción de los italianos de la UE el voto que ha acabado con la renuncia de Renzi, tras un Gobierno de 1.017 días.

Igual de contundente se mostró el responsable de las Finanzas de Alemania, Wolfgang Schäuble, quien aseguró que "no hay ninguna razón para hablar de una crisis del euro" tras la votación en Italia y marcó la senda de trabajo del futuro jefe del Gobierno italiano. "Italia debe continuar política y económicamente el camino recorrido consecuentemente en los últimos tres años por el primer ministro Renzi", resumió Schäuble.

El sólido rechazo a la reforma constitucional propuesta por Renzi en el referéndum del domingo (40,89 % frente al 59,11 %) ha llevado al primer ministro a presentar su dimisión, como había prometido en campaña, lo que añade inestabilidad a un exigente período electoral para la Unión Europea, que con comicios en Holanda (marzo), Francia (abril y mayo) y Alemania (entre agosto y octubre). "Hay un espacio público europeo emergente que lleva a los europeos a seguir de cerca los procesos electorales democráticos en todos los Estados miembros. Esto es bueno para Europa y es bueno que Europa sea parte de estos debates", señaló Schinas respecto a que cada vez se analicen las elecciones nacionales en clave más europea.

En ese sentido, el órgano de comunicación de la Comisión Europea se mostró más locuaz al analizar el voto austríaco que, ofreció una victoria clara si se interpreta en clave europea tras unos meses de sobresaltos desde la decisión del pueblo británico de abandonar la UE en el referéndum del "brexit" en junio hasta la victoria de Donald Trump en la carrera a la Casa Blanca en noviembre.

"Europa ha sido central en la campaña para la elección del presidente (austríaco) y el resultado final habla por sí solo", añadió el portavoz comunitario sobre unos comicios en los que el progresista y ecologista Alexander Van der Bellen se impuso con un 53 % a la baza eurocrítica y ultraderechsita de Norbert Hofer (46%).