El Parlamento venezolano acata la orden del Supremo y separa a los diputados suspendidos

  • El Chavismo celebra que el Parlamento cumpla la sentencia del Supremo

El Parlamento venezolano, controlado por la oposición al Gobierno, acató hoy el fallo del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) que dictó la suspensión de los tres opositores elegidos por el estado de Amazonas, por lo que había sido declarado en desacato. "Se acata o se cumple, o se observa, palabras sinónimas. No tenemos ningún problema con decirlo si eso satisface o contribuye a que ustedes asistan a la Cámara a cumplir con sus deberes constitucionales", dijo el presidente del Parlamento, Henry Ramos Allup.

De esta manera y mientras el Tribunal Supremo de Justicia decide sobre la impugnación chavista de la elección de los legisladores amazónicos, la mayoría cualificada que tiene la opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) en la Asamblea Nacional se reduce de 112 a 109 legisladores.

La bancada chavista del Parlamento venezolano celebró hoy la decisión de la directiva de acatar el fallo del Supremo que dictó la separación de tres opositores que juraron el cargo de diputado pese a que había una medida cautelar que ordenaba suspenderlos. "Hemos aplaudido esa actitud que vuelve a poner a esta Asamblea Nacional (AN, Parlamento) en el marco de la legalidad, de la constitucionalidad", dijo a los periodistas el jefe del grupo chavista, el diputado Héctor Rodríguez, tras conocerse la decisión de la directiva de acatar el fallo.

La decisión de acatar el fallo del Tribunal Supremo de Justicia se da después de que los tres opositores suspendidos decidieran solicitar al Parlamento su separación del cargo para poder defenderse y a la vez poner punto final a la crisis institucional que implicó su incorporación a la Asamblea.

Nirma Guarulla, Romel Guzamana y Julio Ygarza son los tres diputados elegidos por el estado Amazonas cuya proclamación fue suspendida por el Tribunal Supremo de Justicia, días antes de tomarles juramento, como medida cautelar al recurso de impugnación interpuesto por el chavismo y que alegó fraude en las elecciones de ese estado.

La junta directiva de la Asamblea Nacional, controlada por la oposición, decidió desobedecer la medida y tomó juramento a los tres diputados lo que provocó una nueva sentencia del Tribunal Supremo de Justicia, que decretó el desacato de la Cámara nuevamente formada y la nulidad de todos sus actos mientras los parlamentarios suspendidos no abandonasen sus cargos.

El chavismo se había negado a proporcionar quórum al Parlamento mientras este se mantuviera en desacato, y el presidente venezolano, Nicolás Maduro, solicitó al Tribunal Supremo de Justicia que precisara a qué instancia debía rendir cuentas y cuándo, si la AN insistía en el desacato.