La OTAN anuncia que su escudo antimisiles comienza a ser operativo

  • Obama encuentra un "amplio consenso" en la OTAN a su plan para Afganistán

El escudo de defensa antimisiles de la OTAN está ya parcialmente operativo, según anunció hoy el secretario general de la Alianza, Anders Fogh Rasmussen. "Es el primer paso hacia nuestro objetivo a largo plazo de dar una protección completa al territorio y la población de los países europeos de la OTAN", dijo Rasmussen en una rueda de prensa tras la primera sesión de trabajo de la cumbre de la OTAN que hoy comenzó en Chicago.

El anuncio de la capacidad interina supone que el sistema básico de mando y control, que incluye un radar avanzado estacionado en Turquía, un satélite de comunicaciones y un buque especializado en defensa antiaérea (todos ellos estadounidenses) trabajan conjuntamente entre sí y dentro del sistema de mando de la Alianza. Sin embargo, la Alianza Atlántica no informa de cuánta porción del territorio europeo podría protegida por ahora contra un hipotético ataque con misiles balísticos.

El objetivo es incrementar gradualmente la cobertura con aportaciones de varios países (radares situados en tierra o mar, instalaciones de misiles en tierra, más buques de defensa aérea), de forma que se espera que todo el sistema esté completado en los próximos ocho o diez años.

Rasmussen destacó la rapidez de ejecución, después de que la cumbre de la OTAN de Lisboa (noviembre de 2010) aprobó que la organización se dotara de este mecanismo de protección. "Nuestro sistema unirá elementos de diferentes aliados" bajo el mando de la OTAN y "nos permitirá defendernos frente a amenazas de fuera de la zona euroatlántica", añadió el secretario general.

CONTRIBUCIÓN DE ESPAÑA

España contribuirá albergando en la base de Rota cuatro buques estadounidenses, aunque Madrid y Washington no han firmado aún los detalles concretos del acuerdo bilateral. La creación de este sistema sigue teniendo la oposición de Rusia, que teme que pueda permitir una defensa contra sus armas nucleares y romper así el equilibrio estratégico entre Moscú y Washington y sus aliados de la OTAN.

Si bien en la cumbre de Lisboa de noviembre de 2010 la OTAN y Rusia acordaron cooperar en defensa antimisiles, la oposición de la Alianza a la idea rusa de compartir un sistema común ha dado nuevas alas a las reticencias del Kremlin.

OBAMA ENCUENTRA UN "AMPLIO CONSENSO" EN LA OTAN A SU PLAN PARA AFGANISTÁN

El presidente de EE.UU., Barack Obama, encontró hoy un "amplio consenso" en la OTAN a su plan para garantizar la seguridad en Afganistán una vez que las tropas aliadas se retiren, y reiteró que la guerra como tal terminará en 2014, aunque advirtió que queda mucho trabajo por delante.

La cumbre de la OTAN va a estar dedicada en gran parte "a ratificar y reflejar el amplio consenso con muchos de nuestros socios" sobre cómo seguir apoyando durante los próximos años la transición en Afganistán, dijo Obama tras reunirse con su homólogo afgano, Hamid Karzai. En 2014, "la guerra en Afganistán habrá terminado, pero continuará nuestro compromiso de amistad y cooperación" con ese país, agregó el presidente, que elogió los "excelentes progresos" de las fuerzas afganas en el proceso para transferirles la responsabilidad de la seguridad, aunque admitió que queda "mucho trabajo" por hacer.

"Habrá días difíciles por delante, pero estamos seguros de que vamos por el buen camino" en Afganistán, cuyos ciudadanos "desean desesperadamente la paz y la seguridad", subrayó. Obama busca en esta cumbre de la OTAN, que se celebra en la ciudad donde inició su carrera política, una plataforma para refrendar su estrategia en Afganistán y, sobre todo, su compromiso con culminar la retirada a finales de 2014, como fija el calendario establecido por la Alianza.

Cada vez son más los estadounidenses que se oponen a la presencia de su país en Afganistán, según encuestas recientes, y eso puede pesar en un año en el que Obama se jugará la reelección en las elecciones de noviembre. Pero, al mismo tiempo, Obama cree que no se puede salir de golpe y dejar huérfanas a las fuerzas afganas a partir de 2015, fundamentalmente para evitar que los talibanes, una de las principales amenazas a la seguridad de EE.UU., vuelvan a adueñarse del país.