Netanyahu rechaza la propuesta de Obama y asegura que las fronteras del 67 "no son defendibles"

El primer ministro de Israel se reúne esta tarde con el presidente de Estados Unidos en la Casa Blanca, tras el discurso de Obama sobre Oriente Próximo. La propuesta de un Estado palestino con las fronteras de 1967 no ha gustado a Netanyahu por indefendible, sobre todo, porque el grupo terrorista Hamas sigue sin reconocer a Israel y sin renunciar a la violencia.

Esta posición realmente no es nueva en el Gobierno estadounidense, pues Bill Clinton ya la había formulado en los años noventa. Pero sí es la primera vez en que Obama se refiere específicamente a ella.

El Gobierno israelí, encabezado por el primer ministro Benjamin Netanyahu, reaccionó de inmediato y airadamente contra esta propuesta, que consideró "impracticable". Netanyahu, dijo hoy que las fronteras de 1967 "no son defendibles" y pidió al presidente estadounidense, Barack Obama -que las propuso como base para la paz- que refrende un compromiso de no exigir la retirada a las mismas.

"Netanyahu espera oír de Obama que refrenda los compromisos americanos a Israel de 2004 que recibieron el apoyo de las dos cámaras. Estos compromisos tienen que ver entre otros con que a Israel no se le exigirá retirarse a las fronteras de 1967 y que los grandes centros de población en Judea y Samaria (Cisjordania) quedarán fuera de esas fronteras", señaló en un comunicado.

Y entre la derecha estadounidense surgieron de inmediato las voces, como las del aspirante republicano a la presidencia Mitt Romney, que consideraron que Obama había "echado a los perros" a Israel.

Pero lo cierto es que entre los árabes no hubo mucha más satisfacción.

Obama se hizo eco de la "preocupación" que despierta en Israel la reconciliación entre Al Fatah, que gobierna Cisjordania, y el grupo radical Hamás.

Y advirtió de que la votación que tendrá lugar en septiembre en la ONU para aprobar un Estado palestino será sólo "simbólica" y no servirá para crear un país independiente.

Ese Estado independiente palestino sólo podrá surgir, a su juicio, de las negociaciones con Israel.

En esas negociaciones deberá acordarse, entre otras cosas, la retirada "gradual pero completa" de las fuerzas israelíes de los territorios palestinos, que se constituirán en un "Estado soberano y contiguo" pero también "desmilitarizado".

"El sueño de un Estado judío y democrático no se puede lograr mediante una ocupación permanente", subrayó el presidente estadounidense.

Pero pese a subrayar la urgencia de retomar las negociaciones, Obama no planteó pasos concretos para que ambas partes vuelvan a sentarse a la mesa.

"Ha planteado una propuesta pero no una auténtica vía para su puesta en práctica", declaró Robert Satloff, del Instituto de Washington.

A juicio de este analista, es significativo que Obama no aprovechara el discurso para nombrar un nuevo enviado especial para la zona ni aludiera a George Mitchell, quien ocupó ese puesto hasta su dimisión la semana pasada y quien se encontraba entre la audiencia durante el discurso.

Ante la falta de pasos concretos, consideró por su parte el ex ministro de Exteriores jordano Maruan Muasher, actualmente analista del Fondo Carnegie para la Paz, el discurso "no va a ayudar" a Estados Unidos a recuperar una influencia que "está en declive en Oriente Medio".

Aunque Obama se ha declarado en contra de la votación del Estado palestino en la ONU, "los palestinos no se van a quedar callados después de septiembre y esperar a que pasen las elecciones presidenciales en Estados Unidos el año próximo" para exigir la creación de su país, opinó.

Los procesos de agitación civil surgidos desde enero en Oriente Medio, a juicio de este analista, han abierto la caja de Pandora.

"Los árabes han aprendido que tienen que resolver las cosas por su cuenta y que depender en exceso de Estados Unidos no va a dar resultados", indicó.

Este discurso, predijo, "pasará básicamente de largo en Oriente Medio".

Obama recibe a Netanyahu tras proponer una Palestina basada en fronteras 1967

Washington, 20 may (EFE).- El presidente de EE.UU., Barack Obama, se reúne hoy con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, un día después de proponer, y que éste rechazara, un Estado palestino con la base de las fronteras de 1967.

Es el primer encuentro bilateral entre los dos líderes en un año y la tercera visita de Netanyahu a la Casa Blanca desde la llegada al poder de Obama.

En esta ocasión, la reunión se celebra cuando el mandatario estadounidense se encuentra inmerso en una semana dedicada a la política para Oriente Medio, a la luz de los procesos de transición en los países árabes, y busca dar un nuevo impulso al proceso de paz entre israelíes y palestinos, que considera "más urgente que nunca" ante las protestas en la región.

En un discurso en el Departamento de Estado el jueves, Obama consideró que el Estado palestino que emerja en el futuro deberá tener como base las fronteras de 1967, antes de la Guerra de los Seis Días en la que Israel se hizo con el control de la Península del Sinaí, Gaza, Cisjordania, Jerusalén este y los altos del Golán.

Antes de partir hacia Washington, donde participará en la conferencia anual de AIPAC, el principal grupo de presión pro israelí en EE.UU., y ofrecerá un discurso ante el Congreso estadounidense, Netanyahu aseguró que la propuesta de Obama es "impracticable".

En su discurso, Obama advirtió también a los palestinos contra la planeada votación a favor de un Estado palestino en la ONU el próximo septiembre, que consideró que será sólo "simbólica" y no servirá para establecer el país independiente que este pueblo busca.

Obama también tiene previsto pronunciar el próximo domingo un discurso en la conferencia de AIPAC, la primera que pronunciará en ese foro como presidente de EE.UU.