La Comisión Europea reitera su apoyo al "orden constitucional" en España

  • "Llamamos a todos los actores relevantes que pasen de la confrontación al diálogo"
  • Juncker y Tusk hablan con Rajoy tras los incidentes en Cataluña

La Comisión Europea (CE) reiteró hoy su apoyo al "orden constitucional" en España y su confianza en el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y señaló que son "tiempos para la unidad y la estabilidad". "La Comisión cree que son tiempos para unidad y estabilidad, no división y fragmentación. Llamamos a todos los actores relevantes que pasen de la confrontación al diálogo. La violencia nunca puede ser un instrumento en política", declaró el portavoz jefe de la Comisión Europea, Margaritis Schinas, en la rueda de prensa diaria de la institución. El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha hablado este lunes con el jefe del Ejecutivo comunitario, Jean-Claude Juncker, y el presidente del Consejo europeo, Donald Tusk, en sendas conversaciones telefónicas para abordar los incidentes que rodearon la celebración del referéndum ilegal de independencia este domingo en Cataluña.

El portavoz de la Comisión Europea agregó que "bajo la Constitución española, el voto de ayer en Cataluña no era legal. Para la Comisión Europea, como ha reiterado el presidente (Jean-Claude) Juncker, repetidamente, este es un asunto interno de España que debe ser manejado en línea con el orden constitucional de España".

"Reiteramos la posición legal que sostiene esta Comisión, también por sus predecesoras: si se organizara un referéndum en línea con la Constitución, el territorio saliente quedaría fuera de la Unión Europea", agregó.

El portavoz jefe del Ejecutivo comunitario hizo un llamamiento "a todos los actores relevantes para que se muevan con prontitud de la confrontación al diálogo. La violencia nunca puede ser una herramienta en política".

"Confiamos en el liderazgo del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, para gestionar este difícil proceso desde el respeto absoluto a la Constitución española y de los derechos fundamentales de los ciudadanos", prosiguió.

La Comisión Europea indicó que "los gabinetes de Rajoy y Juncker estuvieron en contacto durante el fin de semana" y "una conferencia telefónica está programada esta tarde" entre el presidente de la Comisión Europea y el presidente del Gobierno español.

El portavoz no comentó las declaraciones del presidente de la Generalitat de Cataluña, Carles Puigdemont, pidiendo la implicación de la Unión Europea en la situación.

El presidente del Consejo europeo, Donald Tusk ha hablado este lunes con Rajoy al que ha trasladado su apoyo al orden constitucional de España pero también ha pedido un esfuerzo para evitar más tensiones y el uso de la fuerza.

EURODIPUTADOS DE PODEMOS PIDEN A JUNCKER QUE ESTUDIE UNA SANCIÓN A ESPAÑA

Los cinco eurodiputados de Podemos en el Parlamento Europeo han remitido una carta al presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, con la que piden que estudie la posibilidad de poner en marcha el artículo 7 de la Unión Europea, para examinar si el Gobierno español ha cometido una "violación grave" del Estado de Derecho en su actuación para frenar el referéndum independentista de la Generalitat. Según los parlamentarios del partido morado, el Gobierno ha socavado "los valores esenciales de la Unión Europea establecidos en el artículo 2 del Tratado de la UE (TUE)" y, por ello, procede estudiar la puesta en marcha del artículo 7, que consta de dos fases, y que puede llevar a suspender determinados derechos del Estado miembro, incluido su derecho a voto en la UE. Este último paso requiere, eso sí, el visto bueno de una mayoría cualificada de los 28.

"Las imágenes de la Policía reprimiendo violentamente a los ciudadanos que buscan expresar su opinión sobre la independencia de Cataluña se están viendo en todo el mundo y están causando una condena generalizada", critican los eurodiputados en la misiva, en la que añaden que "la gestión del conflicto catalán por parte del Gobierno de España es inapropiada para un Estado miembro de la Unión Europea".

El artículo 7 de la Unión Europea, que nunca se ha aplicado, establece un proceso en dos etapas para actuar ante las violaciones de las libertades fundamentales en un Estado miembro.

El Consejo, a instancias de la Comisión, del Parlamento Europeo o de un tercio de los propios países de la UE, puede iniciar la primera fase para examinar si existe un "riesgo claro de violación grave" del Estado de derecho, para lo que sería necesario el visto bueno de cuatro quintas partes de los 28.

El siguiente paso, que ya exigiría la unanimidad del Consejo, supondría constatar que existe una "violación grave y persistente" en el país investigado. A partir de esa señal, los Veintiocho podrían, por mayoría cualificada, suspender determinados derechos del Estado miembro, incluido su derecho a voto en la UE.