Antigüedades y restos arqueológicos, las otras "víctimas" de las revueltas en Egipto

  • La UNESCO pide que se proteja el patrimonio cultural en Egipto
  • Varios almacenes con objetos antiguos han sido saqueados en distintos lugares de Egipto

La Organización de Naciones Unidas para la Educación la Ciencia y la Cultura (UNESCO) ha hecho un llamamiento para que se proteja el patrimonio cultural en Egipto ante los actos de pillaje registrados en los últimos días y solicitó "a todas las partes en conflicto" que respeten también la libertad de expresión en el país. Varios almacenes de distintos lugares de Egipto que contienen objetos antiguos han sido saqueados por personas que han robado y dañado algunos de ellos, según han informado arqueólogos y empleados de los depósitos. Los destrozos han llegado hasta el propio Museo Egipcio, en El Cairo, el centro mundial más importante de restos faraónicos. En Ismailia, un grupo de ladrones ha asaltado un almacén del Museo de Qantara, en cuyo interior había unos 3.000 objetos de la época de los imperios romano y bizantino, según una fuente de la Policía de Turismo.

"Los monumentos y las obras de arte del patrimonio cultural egipcio forman parte del legado ancestral de la humanidad que nos ha llegado a través de los siglos", dijo en un comunicado la directora general de la Organización de Naciones Unidas para la Educación la Ciencia y la Cultura (UNESCO), Irina Bokova.

Bokova recordó que "las 120.000 obras del Museo Egipcio de El Cairo", hasta el que se han extendido las acciones de pillaje durante las protestas, "tienen un valor científico y económico incalculable, pero su valía es ante todo inestimable porque encarnan la identidad cultural de la población egipcia".

"Pido solemnemente que se adopten todas las medidas necesarias para proteger los tesoros de Egipto en El Cairo, en Luxor y en todos los demás sitios culturales e históricos del país", señaló la representante de la UNESCO.

En su mensaje solicitó también que se respete la libertad de expresión, "pilar esencial de la democracia", y destacó que "impedir a los medios de información que lleven a cabo su labor no restablecerá la tranquilidad, ni tampoco creará las condiciones necesarias para que se entable un diálogo constructivo". Bokova consideró "preocupantes" las noticias recibidas sobre la suspensión de los servicios de acceso a Internet, el cierre de la cadena de televisión qatarí Al Yazira en Egipto, la revocación de las credenciales de sus periodistas, y la supuesta detención de algunos reporteros.

Ante todo, no obstante, la directora de la UNESCO expresó su "compasión hacia las víctimas de la protesta cívica y sus familias", y deploró la muerte de, según sus cifras, 190 personas en las manifestaciones contra el régimen egipcio.

EL EJÉRCITO PIDE AYUDA A LA POBLACIÓN PARA FRENAR LOS SAQUEOS

En Ismailia, un grupo de ladrones ha asaltado un almacén del Museo de Qantara, en cuyo interior había unos 3.000 objetos de la época de los imperios romano y bizantino, según una fuente de la Policía de Turismo.

Muchas de estas antigüedades fueron halladas en la península del Sinaí por los israelíes antes de que éstos ocuparan la zona durante la guerra que libraron en 1967 con Egipto. El Estado hebreo las había devuelto recientemente a las autoridades del país árabe.

Un empleado del depósito ha indicado que los saqueadores decían que buscaban oro y que aunque él les aseguró que allí no había oro, siguieron con el saqueo, rompiendo algunos objetos y llevándose otros.

Un arqueólogo ha afirmado que también varios almacenes próximos a las pirámides de Saqqara y Abu Sir han sufrido actos de pillaje. "En otros lugares, los guardias y los vecinos han conseguido echar a las bandas de saqueadores", ha agregado.

El viernes pasado, unos ladrones entraron por la fuerza en el Museo Egipcio, en El Cairo, que alberga una de las mayores colecciones de tesoros faraónicos del mundo, y destrozaron varias estatuas y dañaron dos momias mientras la Policía se enfrentaba en las calles a los manifestantes antigubernamentales.

Ante esta situación, los soldados egipcios han comenzado a desplegarse por las calles de El Cairo y de otras ciudades para hacer frente a las acciones de pillaje que están empañando la revuelta popular que estalló el martes pasado.

Segun la televisión pública egipcia los efectivos del Ejército coordinan sus acciones con voluntarios que han formado comités de barrio para reemplazar a la policía, que prácticamente ha desaparecido de las calles.

Otros objetivos han sido tiendas, bancos, oficinas públicas y sedes del gobernante Partido Nacional Democrático (PND), edificios que han sido asaltados por grupos descontrolados amparados por las protestas políticas que se están desarrollando.

El Ejército ha pedido incluso la participación de la población para combatir estos actos.