El PP pierde la mayoría absoluta en la capital y Ahora Madrid gana en 21 distritos

El PP de Madrid ha perdido la mayoría absoluta en el Ayuntamiento de la capital tras 25 años de gobierno en solitario, después de que su candidata, Esperanza Aguirre, se haya hecho con el 34,55 por ciento y 21 escaños.

No obstante, la decisión de los madrileños en las urnas ha hecho que la de Esperanza Aguirre sea la lista más votada en el Ayuntamiento en una contienda electoral en la que hasta el último momento, la candidata de Ahora Madrid, con 20 escaños, le ha seguido muy de cerca,

Si el nerviosismo corría por las venas de los integrantes de su lista, y en algunos casos se manifestaba de manera sutil, no ha sido ese el caso de la propia alcaldable, que durante toda la campaña se ha mostrado muy cómoda, incluso dando la sensación de estar disfrutando con el reto.

Ella era consciente de que las elecciones de este domingo no eran unos comicios como otros cualquiera, que "hay mucho juego", como no ha parado de repetir, sobre todo en los últimos días de campaña. "No esta nada claro que las vamos a ganar. El domingo todos a votar al Partido Popular", decía en el penúltimo mitin, compartido con la ministra de Fomento, Ana Pastor, con escrache incluido.

La del PP es la lista más votada pero eso no conlleva hablar de victoria rotunda de los conservadores. Ahora el panorama es muy diferente a lo ocurrido hace cuatros, cuando el PP reeditó su mayoría absoluta con 31 concejales (55,6 por ciento de los sufragios) para Alberto Ruiz-Gallardón, dos más de los necesarios para gobernar sin necesidad de acuerdos para las decisiones a adoptar.

El PP entonces era hegemónico en la ciudad, ganó en todos los distritos menos en uno, Puente de Vallecas, mientras el PSOE iniciaba su caída libre. Salamanca (64,17 por ciento), Chamartín (63,25 por ciento) y Chamberí (59,39 por ciento) son los distritos donde el PP cosechó sus mejores resultados en 2011 mientras que este domingo Ahora Madrid se ha hecho con once de los 21 distritos.

Las elecciones europeas del pasado año ya fueron la antesala de lo que podría ocurrir en estas municipales. En ellas el PP ocupó en Madrid el primer puesto como partido favorito de los madrileños, con un 29,88 por ciento, muy lejos de la segunda opción, el PSOE, que registró un 18,94 por ciento.

El foco está puesto en esta noche electoral en los socialistas de Antonio Miguel Carmona, que ven cómo se despeñan hasta la tercera posición en el Ayuntamiento con sus 9 escaños y que si alcanza un acuerdo con Manuela Carmena, posibilitaría que la izquierda regresara al Consistorio.

Ahora Madrid, con Manuela Carmena a la cabeza, está también muy cerca de hacerse con el bastón de mando con 20 escaños y materializa la senda abierta en las europeas por Podemos, la formación 'amiga', que fue la vencedora moral de los comicios de hace un año, con el 11,28 por ciento de los votos.

Ciudadanos son otros de los protagonistas de la noche porque han entrado en el Consistorio aunque finalmente no serán llave de Gobierno, tal y como presagiaban las encuestas, dado que sus concejales sumados a los del PP, en el caso de que se apoyaran no conseguiría la mayoría absoluta de los 29.

En las elecciones europeas se quedaron a sólo unas décimas en Madrid de alcanzar el soñado 5 por ciento (4,80 por ciento) pero en esta ocasión han entrado por la puerta grande con siete ediles y 11,41 por ciento.

Y la de hoy también ha sido una noche de despedidas. Raquel López no sólo se despide de su sueño de un gobierno de izquierdas en la capital sino de IU con representación en el Ayuntamiento al no conseguir el ansiado 5 por ciento que da derecho a la conformación de grupo.

Dice así adiós una formación política que podría suponer también la despedida de IUCM: al no conseguir grupo, el partido no recibe las necesarias subvenciones, no embargables, que darían aire a la coalición de izquierdas y que les garantizaría la supervivencia.

También es noche de despedidas para los magenta de UPyD. Cuatro años después de llegar al Ayuntamiento, los de David Ortega dejarán el Palacio de Cibeles al quedar muy lejos el 7,85 por ciento de los votos conseguidos hace cuatro años y que les permitió tener hasta cinco concejales.