Los nacionalistas apoyan al Gobierno para retrasar la jubilación a los 67 años

  • Exigen que se haga de forma progresiva y el PP se abstiene en la votación
  • El PP recuerda que supone la mayor subida de impuestos a los ciudadanos de la historia

El viernes el Gobierno aprobará la reforma de las pensiones que alarga la edad de jubilación a los 67 años con o sin acuerdo con los sindicatos. Este martes en el Congreso se han votado las recomendaciones del Pacto de Toledo donde el Gobierno sí ha logrado el aval de los grupos nacionalistas.

Votación en el Congreso de la reforma de las pensiones. Los nacionalistas catalanes, vascos y canarios avalan al Gobierno en el retraso de la jubilación a los 67 años. El objetivo, según CIU, sería dar tiempo al Gobierno para que consiga alcanzar un acuerdo con los sindicatos antes del viernes, fecha en la que el consejo de ministros aprobará la nueva ley .

No obstante, el portavoz de CiU en el Congreso, Josep Antoni Duran i Lleida, ha dejado hy claro que el acuerdo alcanzado con el PSOE en torno a las recomendaciones del Pacto de Toledo no supone que su grupo vaya a apoyar el proyecto de ley de reforma de las pensiones que aprobará el viernes el Consejo de Ministros.

En declaraciones en los pasillos del Congreso, Duran ha hecho hincapié en que no tiene "ni idea" de cuál va a ser el contenido final de esa norma, por lo que el voto de hoy en el Congreso "no avanza ninguna posición de CiU al respecto".

Los nacionalistas catalanes han presentado hoy en la Cámara Baja un nuevo voto particular a las recomendaciones del Pacto de Toledo, que, con el apoyo del PSOE, PNV y CC, previsiblemente se incorporará al informe final.

En un principio CiU consideraba que no parecía "imprescindible y necesario aumentar la edad legal de jubilación", una frase que ha cambiado para señalar que "cualquier modificación de la edad legal de jubilación deberá ser progresiva" y en ningún caso de manera homogénea y forzosa.

En opinión de Duran, el debate parlamentario no tiene por qué influir en la mesa de diálogo que mantienen el Gobierno, los sindicatos y los empresarios, donde el acuerdo "no es fácil, pero es posible", según la información que le han proporcionado desde el Ejecutivo y desde los representantes de los trabajadores.

Durán ha apoyado esta negociación porque, ha dicho, sería conveniente que agotasen todos los plazos antes de que el Consejo de Ministros apruebe el proyecto de ley el viernes.