Hacienda insta a los altos directivos públicos a viajar en turista y transporte público

  • Se aplicará a los contratos mercantiles o de alta dirección que se firmen a partir de este viernes
  • El PSOE tacha de "broma de mal gusto" la orden de hacienda a los altos cargos
El déficit llega al 1,2% hasta abril, pero el Estado supera su objetivo para 2016
Equipo de Montoro en el ministerio de Hacienda |Telemadrid

El Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas ha elaborado una serie de "indicaciones" para recortar los gastos de los máximos responsables y directivos del sector público estatal con contratos mercantiles o de alta dirección, entre las que se encuentran la de acogerse a la tarifa turista en sus viajes de avión o tren y la de utilizar con carácter general el transporte público para sus desplazamientos.

Esta lista de indicaciones -ocho en total- vienen recogidas en una Orden publicada este jueves en el Boletín Oficial del Estado (BOE) y firmada por el ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro. La Orden, que se aplicará a los contratos mercantiles o de alta dirección que se firmen a partir de mañana, fecha de su entrada en vigor, fija el sistema de compensación por gastos en concepto de dietas y desplazamientos para los máximos responsables y directivos del sector público estatal.

Además, la Orden establece una serie de "criterios de buena gestión" para ajustarse a los principios de austeridad en el gasto, "imprescindibles en el actual contexto de restricciones presupuestarias".

Estos criterios persiguen, según Hacienda, el asegurar la existencia de unas condiciones homogéneas de aplicación al mencionado personal y tienen en cuenta los actuales principios generales de "austeridad, eficiencia y transparencia" en el sector público.

GESTIONAR ANTICIPADAMENTE LOS BILLETES PARA VIAJAR

Además de animar a estos altos directivos a utilizar en sus desplazamientos el transporte público cuando el uso del vehículo particular no sea lo más económico y a acogerse a la tarifa turista en los viajes de avión o tren, salvo casos excepcionales y justificados, Hacienda también les sugiere que recurran a audio o videoconferencias como alternativa a las reuniones o desplazamientos y que apliquen "criterios restrictivos" en cuanto al número de personas que han de desplazarse, evitando los desplazamientos "innecesarios" de equipos de trabajo.

Asimismo, el Ministerio insta a fijar criterios temporales "estrictos" para el inicio y la finalización del servicio, evitando adelantar o prolongar de manera injustificada la estancia en destino; a utilizar con carácter general los hoteles incluidos en el contrato suscrito de forma centralizada por la Administración General del Estado o el Ministerio de adscripción, y a planificar y gestionar anticipadamente los billetes para sus desplazamientos a fin de obtener los mejores precios.

Hacienda da dos meses de plazo a contar desde mañana a las entidades del sector público estatal para adaptarse a las directrices y normas contempladas en esta Orden.

EL PSOE TACHA DE "BROMA DE MAL GUSTO" LA ORDEN DE HACIENDA A LOS ALTOS CARGOS

La dirección del PSOE considera una "broma de mal gusto" la orden del Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas a los altos cargos de empresas públicas para que viajen en transporte público y en clase turista. En rueda de prensa, el portavoz del PSOE en el Congreso de los Diputados, Antonio Hernando, aseguró que esa orden ministerial "parece una broma de mal gusto" por varios motivos.

En primer lugar, por dictarse cuatro meses antes de las elecciones generales después de "lo que ha estado cayendo" durante toda la legislatura. También, añadió, porque se refiere solo a altos cargos de empresas públicas, no afecta a los del Gobierno, y en todo caso la orden ministerial contiene solo "criterios generales" que no son de obligado cumplimiento para los destinatarios.

Por todo ello, el PSOE considera que se trata de "una broma de mal gusto que nos está gastando el Gobierno", una de las medidas "cosméticas" que se están anunciando antes de las elecciones y en un "final agónico" de la legislatura.