El principal indicador de la bolsa española, el IBEX 35, ha caído hoy un 0,49 % arrastrada por la apertura en negativo de Wall Street, con lo que el retroceso acumulado en la primera semana del año asciende al 3,24 %. A pesar de que los datos de empleo en los Estados Unidos han sido mejores de lo esperado, el Dow Jones cedía poco después del inicio de la sesión un 0,34 %, y las grandes plazas europeas se decantaban a partir de entonces por las pérdidas.
El IBEX 35 retrocedía así 40,5 puntos, con lo que terminaba la sesión en 8.289,1 puntos, mientras que el Índice General de la bolsa de Madrid perdía 4,27 puntos, un 0,51 %, con lo que acumula una caída semanal del 3,44 %. Las pérdidas semanales han estado marcadas por el retroceso del 2,94 % anotado ayer por el IBEX después de que el ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, cifrara en 50.000 millones de euros las necesidades de capital de la banca española.
Sin embargo, la jornada de hoy coincidía con la festividad de Reyes en España, por lo que el volumen de negociación registrado ha sido muy bajo y no se ha contado con ningún dato de referencia nacional importante. Así, la apertura a la baja de Wall Street ha decidido el cierre de la sesión, lo que ha eliminado las ganancias acumuladas hasta primera hora de la tarde.
El bono español a diez años anotaba poco antes del cierre una rentabilidad del 5,71 %, frente al 5,67 % de la apertura. Esto incrementaba la prima de riesgo española -el diferencial entre la rentabilidad del bono alemán a diez años y su equivalente nacional- hasta los 385 puntos básicos a esa hora.
En Europa, la bolsa de Milán ha perdido un 0,82 %; la de Fráncfort, un 0,62 %, y la de París, un 0,24 %, mientras que la de Londres conseguía terminar en positivo con un avance del 0,45 %. La prima de riesgo italiana se situaba en este momento en 527 puntos básicos; la belga, en 278, y la francesa, en 158.
Mientras tanto, los depósitos a un día de los bancos de la zona del euro en el Banco Central Europeo (BCE) alcanzaron hoy el récord histórico de 455.300 millones de euros después de que ayer los bancos europeos sufrieran fuertes caídas en bolsa.
