El presidente de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), Juan Rosell, afirmó que los impuestos son necesarios, aunque alertó de que si éstos son "exagerados" acabarán siendo "negativos", porque "desincentivan, asustan y paralizan".
Así lo indicó durante su intervención en el acto de presentación del documento 'Panorama de la fiscalidad autonómica y foral 2016' realizado por el Registro de Asesores Fiscales REAF-Regaf, órgano especializado en materia fiscal del Consejo General de Economistas.
"Hablar de impuestos es hablar de la vida misma", dijo Rosell, para agregar que sin ellos "no habría gasto público ni Estado del bienestar, al que reclamamos absolutamente todo".
"Para vaciar un vaso, primero hay que llenarlo", recordó el presidente de la CEOE, quien añadió que los impuestos, además, son "buenos" cuando "crean riqueza y crecimiento".
Por ello, defendió una tributación "inteligente", es decir, que los impuestos sean "simples, duraderos, no desproporcionados y que no sean confiscatorios". Cuando son exagerados, aseguró, las empresas y familias "se van a buscar la vida".
Por otra parte, el responsable de la patronal reclamó "compromiso político" para mantener una cierta estabilidad en materia tributaria, lo que pasaría, por ejemplo, por limitar los cambios en los impuestos a una vez por legislatura.
