El déficit del Estado continuó con su línea descendente y se redujo el 18,9 % en el primer semestre del año respecto del mismo periodo de 2010 debido principalmente a la disminución del 15 % en la partida de gastos. El secretario de Estado de Hacienda, Juan Manuel López Carbajo, indicó que el dato de los primeros seis meses muestra una tendencia que refleja la estabilización de la economía y confirma que la senda de consolidación fiscal se está cumpliendo. No obstante, destacó que la comparación entre ambos ejercicios es complicada debido a la aplicación del nuevo sistema de financiación autonómica.
Así, hay cambios que afectan a los pagos por transferencias a las comunidades autónomas -que experimentan un importante descenso respecto del año anterior- y a los ingresos por IRPF, IVA e Impuestos Especiales debido al aumento del porcentaje de cesión de la recaudación a las comunidades autónomas.
El déficit del Estado se situó en el primer semestre de 2011 en 24.132 millones de euros, el 2,21 % del Producto Interior Bruto (PIB), con unos ingresos de 49.406 millones de euros, el 13 % menos que hasta junio de 2010, y unos gastos de 73.538 millones, el 15 % menos.
En términos de caja, una metodología contable que anota los ingresos y pagos realizados en el momento en que se hacen efectivos, el Estado presentó un desequilibrio de 23.495 millones de euros, "sensiblemente inferior", según Economía, al saldo negativo de 30.794 millones registrado a cierre de junio de 2010.
López Carbajo insistió en que está "encauzada correctamente" la previsión del Gobierno de cerrar el año con un déficit del 6 % del PIB para el conjunto de las administraciones públicas y subrayó sobre la participación de las comunidades autónomas en este objetivo que "la senda es correcta" y que sus planes de saneamiento recogen un compromiso en este sentido.
Antes de descontar la participación de las administraciones territoriales se contabilizaron unos ingresos no financieros totales de 82.595 millones, el 4,2 % más, de los que los impuestos representan el 92 %, y que aumentaron su recaudación también el 4,2 %.
La recaudación por impuestos directos fue de 38.062 millones de euros, el 3 % más, mientras que los impuestos indirectos crecieron el 5,5 %, tras recaudar 37.656 millones.
El IRPF acumuló una recaudación de 32.297 millones, el 6,5 % más, debido a que se han pedido menos devoluciones, se ha eliminado la devolución anticipada por nacimiento y han crecido las retenciones del trabajo en el sector privado el 3,2 %.
Por el Impuesto de Sociedades se ingresaron 4.006 millones de euros, el 15,6 % menos que en 2010, como consecuencia de la caída de ingresos por el primer pago fraccionado abonado en abril.
En los impuestos indirectos, el IVA obtuvo 26.774 millones, el 9,4 % más, debido principalmente al efecto de la subida de tipos en julio de 2010. López Carbajo afirmó que en junio hay una cierta ralentización en el incremento de la recaudación del IVA respecto a meses anteriores por el aumento de las devoluciones practicadas en el mes, en consonancia con el fuerte crecimiento de las exportaciones.
Además, los impuestos especiales recaudaron 9.400 millones, el 4 % menos, por la caída en el Impuesto Especial sobre las Labores de Tabaco (3,6 %) y en Hidrocarburos (5,1 %).
Los pagos no financieros sumaron 69.183 millones, el 19,7 % menos debido a la disminución de la partida de transferencias corrientes a las comunidades autónomas por el sistema de financiación.
Los gastos de personal se incrementaron el 0,5 % como consecuencia de la evolución de las pensiones de clases pasivas y el efecto de la compensación por la desviación del IPC en 2010.
Por otra parte, la Seguridad Social tuvo un superávit de 8.321,21 millones en los seis primeros meses del año, el 16,06 % menos que en el mismo periodo de 2010, lo que supone el 0,76 % del PIB, producto de unos ingresos de 60.179,68 millones, el 0,44 % menos, y de unos gastos de 51.858,47 millones, el 2,62 % más.
