La bolsa pierde el 1,33% y cierra en los 6.611 puntos, el mínimo anual

  • La prima de riesgo se relaja hasta 482 puntos básicos, tras superar los 500
  • Las nuevas elecciones en Grecia y su posible salida del euro incrementan las incertidumbres

La bolsa española ha perdido este martes el 1,33 por ciento afectada por el retroceso de los grandes valores y ha registrado al cierre un nuevo mínimo anual (6.611 puntos), con lo que se sitúa en niveles de junio de 2003.

Con la prima de riesgo en 480 puntos básicos, el principal indicador del mercado español, el IBEX 35, ha perdido 89,20 puntos, el 1,33 por ciento, hasta 6.611,50 puntos, nivel similar al registrado el 5 de junio de 2003. Las pérdidas anuales aumentan hasta el 22,82 por ciento.

En Europa, Londres cayó el 0,6 por ciento; Fráncfort, el 0,23 por ciento; Milán, el 0,21 por ciento, y el índice Euro Stoxx, el 0,15 por ciento. Sólo subió París, el 0,31 por ciento. La situación griega seguía pesando en la bolsa española en el inicio de la sesión, así como las ventas en el mercado de deuda, con lo que el rendimiento de los bonos a diez años rozaba el 6,5 por ciento y la prima de riesgo superaba los 500 puntos básicos. El euro bajaba de 1,27 dólares.

Con esta presión, el mercado nacional, que también resultaba afectado por la bajada de Wall Street la víspera y de los mercados asiáticos esta madrugada, perdía el nivel de 6.600 puntos poco después de la apertura y marcaba el mínimo anual durante la sesión de 6.536 puntos con una bajada del 2,5 por ciento.

Mientras el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, advertía del "serio riesgo" de que los mercados no presten dinero a España o lo hagan a precios "astronómicos", y solicitaba a la UE un mensaje "claro y contundente" en defensa del euro y de la solvencia de las deudas soberanas de los países europeos, la bolsa iniciaba su recuperación.

Dos horas después de la apertura, tocaba el nivel de cierre de la víspera y se conocían datos europeos -la inflación bajaba una décima en abril en la zona euro, hasta el 2,6 por ciento, y la balanza comercial arrojaba un superávit en marzo de 8.600 millones-.

Pero la bolsa no conseguía escapar de las pérdidas, a pesar de contar con el apoyo de la canciller alemana, Angela Merkel, que señalaba que no quería que Grecia salga del euro, apoyo que luego ampliaba la Comisión Europea, dispuesta a adoptar medidas para impulsar el crecimiento de la economía helena.

Los datos del paro en el Reino Unido servían para apoyar el descenso de las pérdidas, aunque el Banco de Inglaterra recortaba cuatro décimas el PIB previsto para este año, hasta el 0,8 por ciento. Después de conocerse que Grecia tendrá nuevas elecciones legislativa el 17 de junio, el mercado nacional abandonaba las pérdidas y la prima de riesgo bajaba a 470 puntos básicos.

El alza del 2,6 por ciento de las casas iniciadas en Estados Unidos el mes pasado, aunque los permisos de construcción cayeron el 7 por ciento, mantenía la subida de la bolsa, que también se apoyaba luego en el crecimiento del 1,1 por ciento de la producción industrial estadounidense.

El final de la sesión estuvo condicionado por las dificultades de Wall Street para consolidar sus ganancias, así como por el cambio de tendencia en el mercado nacional al bajar los grandes valores y caer algunas plazas europeas por el temor a que el Banco Central Europeo deje de financiar a algunos bancos griegos.

Al cierre de la jornada, el petróleo Brent se negociaba a 112 dólares el barril y el euro ligeramente por encima de 1,27 dólares. Todos los grandes valores bajaron: Banco Santander, el 1,8 por ciento; Repsol, el 1,29 por ciento; Iberdrola, el 0,78 por ciento; BBVA, el 0,41 por ciento, y Telefónica, el 0,28 por ciento.

Bankia lideró las pérdidas del IBEX con un descenso del 11,12 por ciento, en tanto que Bankinter bajó el 4,8 por ciento; Mapfre, el 3,82 por ciento; Red Eléctrica, el 3,32 por ciento, y Sacyr, el 3,1 por ciento. Sólo subieron tres compañías del IBEX: IAG avanzó el 3,04 por ciento; Banco Popular, el 0,6 por ciento, y Gamesa, el 0,25 por ciento. Repitió cotización Banco Sabadell.

Fersa presidió las pérdidas del mercado continuo con una caída del 18,6 por ciento, en tanto que Reno de Medici comandó las subidas con un alza del 4,27 por ciento. La rentabilidad de la deuda española a largo plazo bajaba cinco centésimas y se situaba en el 6,27 por ciento antes del cierre, mientras que el rendimiento de los títulos germanos subía dos centésimas, hasta el 1,49 por ciento. El efectivo negociado se ha situado en 2.503 millones de euros, de los que cerca de 650 fueron intermediados por inversores institucionales.

LA PRIMA DE RIESGO SE SITUA EN LOS 482 PUNTOS BÁSICOS

La prima de riesgo española se ha relajado hoy hasta cerrar en los 482 puntos básicos, después de alcanzar un máximo diario de 507, en medio de rumores acerca de que el Banco Central Europeo (BCE) podría volver a intervenir comprando deuda, algo que lleva nueve semanas sin hacer.

Según los datos del mercado recogidos por Efe, al cierre de la sesión, la rentabilidad del bono español a diez años se reducía hasta el 6,292 % desde el 6,508 % de la apertura, mientras que el de su homólogo alemán se situaba en el 1,47 %.

La prima de riesgo española, que cerró ayer en los 485 puntos básicos, máximo desde la creación del euro, se elevaba esta mañana en 22 puntos básicos, afectada por el fracaso de las negociaciones para constituir un Gobierno de coalición en Grecia y la consiguiente decisión de convocar nuevas elecciones legislativas en junio. Una situación que podría provocar que el país salga del euro.

Además, según los expertos consultados, el riesgo país se veía influido por las dudas que rodean al sector financiero español y a la situación de las comunidades autónomas. Todos estos factores influían en la subida de la prima de riesgo española hasta niveles que hacían esperar a los inversores que el BCE reactive la compra de deuda. El pasado mes de agosto, el BCE comenzó a compra deuda de los países periféricos para ayudar a reducir el elevado rendimiento que tienen que ofrecer los bonos a diez años en comparación con el alemán, al que los inversores acuden cada vez que surgen dudas sobre otros países más débiles.

Una medida que el banco dejó de realizar hace nueve semanas y que podría volver a activar, según los analistas, que han indicado que esta posibilidad es la que ha motivado la caída de la prima de riesgo española y la del resto de países periféricos.

Entre estas nuevas tensiones del mercado, el Tesoro público español espera captar mañana entre 1.500 y 2.500 millones de euros en bonos y obligaciones con vencimiento en 2015 y 2016, después de que el martes adjudicase 2.903 millones en letras a doce y dieciocho meses con un interés mayor.

En cuanto a la prima de riesgo del resto de países periféricos, la de Grecia se relajaba ligeramente hasta los 2.745 puntos básicos, desde los 2.789 de la apertura, en tanto que la italiana se reducía hasta los 435.

La prima de riesgo de Portugal se situaba en los 1.030 puntos básicos, y la de Irlanda, en los 591. Por su parte, los seguros de impago de deuda (credit default swap o CDS) relativos a los bonos a diez años de España para cubrir la posibilidad de impago de 10 millones de dólares subían y al cierre se cambiaban a 507.000 dólares anuales, los sextos más caros del mundo.

MONTORO VE IMPOSIBLE UN "CORRALITO" EN ESPAÑA

El ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, ha aseverado que en España no habrá "corralito" en 2013 y que es técnicamente "imposible", al tiempo que ha asegurado que en el próximo año se verá "el final del túnel" de la crisis, con el apoyo de Europa.