Rosell espera que el 14N pase rápido por el daño que hará a la economía

Rosell espera que el 14N pase rápido por el daño que hará a la economía
Rosell espera que el 14N pase rápido por el daño que hará a la economía |Telemadrid

El presidente de la CEOE, Juan Rosell, ha confiado en que la jornada de huelga general del 14 de noviembre pase lo más rápidamente posible y que no se generen conflictos por parte ni de los empresarios ni de los trabajadores, al mismo tiempo que ha lamentado la mala imagen que dará España con este paro.

Durante una entrevista concedida a la agencia Efe, Rosell ha pedido tranquilidad y que "no nos pasemos ni unos ni otros" y ha manifestado su respeto hacia la decisión de los sindicatos, aunque considera que la huelga es "inadecuada".

Según Rosell "hace falta ser más productivos", en un momento en que la situación económica es "plana" después de muchos meses de caídas. Aunque ha admitido que hay datos positivos, como los de exportación o la contracción del déficit de las administraciones públicas, ha dicho que se siguen destruyendo empresas y empleo.

CAÍDA DEL PIB LOS DOS PRÓXIMOS AÑOS

La CEOE prevé una caída del 1,5 % o el 1,6 % del PIB para 2012 y 2013 y, según su presidente, habrá "datos muy malos" de paro en el sector público para los próximos meses, de tal forma que ve muy posible llegar a los 6 millones de desempleados.

En este sentido, ha señalado que la reforma laboral "no es automática" y ha lamentado que el Tribunal Constitucional haya admitido a trámite el recurso en contra promovido por el grupo socialista y la Izquierda Plural."Es una pena, porque después de que legislamos siempre estamos poniendo piedras en el camino cuando se hacen según qué cosas".

Por eso, ha criticado una huelga que ha dicho "no nos va a salir gratis" y que, además del coste económico, también dañará la imagen de España, ya que desde fuera pensarán que, por una parte, se pide bajar el déficit, y, por otra, "se tira el dinero haciendo huelgas".A una semana del paro general, el presidente de la CEOE cree que los sindicatos deberían explicar cuáles son sus alternativas.

Para Rosell, apostar por un referéndum "deja fuera de juego a la CEOE" puesto que los empresarios "no juegan a la política sino a la economía" y a tratar de influir en el Gobierno y en los grupos parlamentarios "diciéndoles cuáles son las mejoras económicas que pueden hacerse". A su juicio, si lo que quieren los sindicatos es cambiar el sistema por otro "a lo suizo o americano" debería trasladar la cuestión a los partidos políticos para que éstos lo planteen a la ciudadanía en las elecciones generales.