Triunfo y buen juego de España ante Escocia, con la ayuda de Llorente

La selección española dio un paso de gigante hacia la Eurocopa 2012, firmando en el mítico Hampden Park el pleno de triunfos en tres partidos, ante una luchadora Escocia que igualó dos goles hasta la sentencia de Fernando Llorente, el día que David Villa pasó a la historia (2-3). Hampden Park transmite su historia en la atmósfera. Es uno de esos estadios donde los futbolistas desean jugar, sueñan con hazañas y disfrutan de partidos repletos de valores que hacen grande al fútbol.

La campeona del mundo dejó su sello ante una afición tan guerrera como sus jugadores, que acabó rendida a la calidad de España. Donde se inscribieron leyendas madridistas, con la conquista de dos Copas de Europa, Villa protagonizó una más. Marcó su tanto 44 para inscribir su nombre en lo más alto de los goleadores de la 'Roja'.

En un partido intenso, para evitar el duelo físico, Vicente Del Bosque apostó por atacar con los bajitos. Pasó a Villa a su hábitat natural, la zona de delantero centro, y alejado de la banda izquierda, escoltado en ataque por la calidad de Andrés Iniesta David Silva y Santi Cazorla, fulminó su ansiedad para asaltar la historia.

PENALTI Y SUFRIMIENTO HASTA EL FINAL

Lo hizo desde el punto de penalti, con sufrimiento hasta el último instante para finalizar una racha de cuatro lanzamientos a la madera. McGregor adivinó la dirección de la pena máxima. Hasta rozó el balón con el guante izquierdo, pero el lanzamiento de Villa iba tan ajustado al palo que acabó en la red.

Fue al borde del descanso y ejecutaba un plan perfectamente diseñado por la 'Roja'. Escocia apretaría de inicio empujado por un ambiente intimidador en la grada. Los minutos debían pasar y el toque debía silenciar al Hampden Park. Un centro de Miller, delantero centro como respuesta de Craig Levin a las feroces críticas a su planteamiento en Praga, espoleó a los suyos.

Regresó Xabi Alonso a la zona de mandos y España lo notó. Escocia reculaba metros a cada toque de los bajitos. Andrés Iniesta da un recital por partido. Recibe el balón y desubica al rival. Siempre que asomó por el costado izquierdo fue un puñal. Encara, con la cabeza arriba, reta al defensor a salir a su paso, y cuando lo hace recorta o lanza la pared. Alonso cambiaba la dinámica con pases en largo medidos.

UNA BUENA PRIMERA PARTE, PERO SIN GOLES HASTA EL 44

Comenzó a avisar España con ocasiones de Villa. Controló bien uno de esos pases de Xabi Alonso a la espalda de los centrales, a los trece minutos, pero disparó desviado con la zurda. En su cabeza se amontonaban las ocasiones perdonadas. Necesitaba marcar. Dos minutos después, cabecea a placer un centro medido de Silva. A las manos de McGregor.

Enseñó sus credenciales Escocia cuando cedió el dominio a España. Con Fletcher, su jugador de más calidad, al mando, aprovechó un error de Villa al buscar una falta en la frontal antes de dar el pase, para lanzar una contra veloz que salvó Piqué para tranquilidad de Iker Casillas. No podía encajar un gol en la portería que defendió durante la primera parte. La misma donde nació su leyenda en la final de la novena Copa de Europa del Real Madrid.

Se alió con Joan Capdevila también. El lateral izquierdo sacó la oportunidad más clara del rival. Cuando a los 18 minutos, de nuevo Fletcher asistió a Morrison, que con todo a placer perdonó. Fue el primer desajuste de una defensa que ha tenido un comportamiento extraño en los dos últimos encuentros.

España comenzó a construir jugadas con paciencia y sus ocasiones fueron llegando. El portero escocés sacó disparos de Silva y Villa. Sergio Ramos cabeceó alto. Su defensa se resquebrajaba ante desmarques de ruptura. Silva lo leyó bien pero no enganchó el pase de Alonso. El aficionado de las islas admira el fútbol bravo y no permite gestos para la galería. La tomó con el español que más se asemeja a su gusto, Sergio Ramos. Un pique por un balón y una posterior caída tras una entrada pusieron el ambiente más en contra. Pero luchó España hasta el último segundo del primer acto y encontró el premio en un remate del defensa andaluz que se estrelló en la mano de Whittaker.

Dispuesta a sentenciar saltó España en el segundo tiempo. Un gol al borde del descanso es siempre psicológico y sin dar síntomas Escocia de levantarse del golpe, se encontró con un zurdazo ajustado de Silva ante el que se lució el portero del Rangers. Villa perdonaba y Cazorla cabecea fuera, en carrera, un buen centro de Ramos. Fue más certero Iniesta. A su buen partido añadió un gol, tocando de primera a la red a pase de Villa. Parecía la sentencia. Lo debieron pensar hasta los internacionales españoles y olvidaron que el guerrero fútbol de las islas británicas nunca se rinde.

OCHO MINUTOS DE RELAX

Dos zarpazos de garra igualaron el marcador en ocho minutos y castigaron al exceso de confianza. Un testarazo de Naismith y Piqué en propia puerta al intentar despejar un centro desde la izquierda de Morrison cambiaron de golpe el panorama. Por segundo día consecutivo (ocurrió ante Lituania), España debía reaccionar y lo hizo como el campeón del mundo que es. Del Bosque movió sus piezas. Sacó al tapete a Pablo Hernández y buscó el remate con la altura de Fernando Llorente.

Sin perder la paciencia, elaboró hasta encontrar el premio final. Un centro de Capdevila lo remachó Llorente, en racha reivindicativa, con números de gran goleador. Restaban diez minutos para el final. El toque amansó a las fieras y Villa acabó perdonando solo ante el portero. No está fino, pero es lo de menos el día que pasa a la historia. La afición del Hampden Park despidió en pie con ovación cerrada a los "gladiadores". El espectáculo futbolístico había sido de su gusto.

Ficha técnica:

2 - Escocia: McGregor; Bardsley, Weir, McManus, Whittaker; Fletcher, McCulloch, Morrison, Dorrans (Mackie, m.80), Naismith, Morrison (Maloney, m.88); y Miller.

3 - España: Iker Casillas; Sergio Ramos, Puyol, Piqué, Capdevila; Busquets (Marchena, m.89), Xabi Alonso, Iniesta; Cazorla (Pablo Hernández, m.70), Silva (Llorente, m.75) y Villa.

Goles: 0-1, m.44: Villa de penalti. 0-2, m.56: Iniesta. 1-2, m.59: Naismith. 2-2, m.67: Piqué en propia puerta. 2-3, m.80: Llorente.

Árbitro: Massimo Busacca (SUI). Amonestó a Fletcher por Escocia. Expulsó a Whittaker por doble amonestación (minutos 44 y 89).

Incidencias: encuentro correspondiente a la tercera jornada del Grupo I de la fase de clasificación a la Eurocopa 2012, disputado en estadio Hampden Park, lleno, ante la presencia de 52.500 espectadores. Los jugadores de la selección española mostraron un brazalete negro en señal de luto por el fallecimiento de Agustín Domínguez, ex secretario general de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF).