El colombiano James Rodríguez se ausentó por segundo día consecutivo del entrenamiento del Real Madrid en la ciudad deportiva de Valdebebas, con una sobrecarga muscular que no le impedirá disputar la final de la Liga de Campeones si Zinedine Zidane lo estima oportuno.
James prosiguió con el trabajo de recuperación que le han diseñado los médicos del Real Madrid, para superar con rapidez una inoportuna sobrecarga muscular. El cuerpo técnico madridista es optimista y no duda en poder contar con el colombiano en la final de la Liga de Campeones que dentro de ocho días disputa en Milán ante el Atlético de Madrid.
ARBELOA, BAJA SEGURA
Más complicado para llegar lo tiene Álvaro Arbeloa, que en principio tampoco iba a contar con minutos en la cita, después de su sufrir un esguince de rodilla. En la mañana del viernes se trató en la ciudad deportiva.
El resto de la plantilla del Real Madrid se entrenó en una calurosa mañana con alta intensidad. En el grupo Lucas Vázquez totalmente recuperado del esguince de rodilla que le impidió jugar en Riazor el último partido de Liga y con jugadores que estaban ‘tocados’ a buen nivel.
Zidane no para de ensayar la puntería con sus jugadores, buscando los mejores remates para la final. Según informa la web tras el calentamiento la plantilla madridista realizó ejercicios de centros desde las bandas y disparos a puerta. Además trabajaron con balón las combinaciones y la presión al rival, antes de acabar con un partido en reducidas dimensiones de mucha intensidad y competitividad.
EL MADRID SE CONJURA DE CARA A LA FINAL CON UNA BARBACOA
La plantilla del Real Madrid cerró la primera semana de preparación de la final de la Liga de Campeones que el 28 de mayo disputa ante el Atlético de Madrid, con un encuentro familiar tras el entrenamiento del sábado, con jugadores y seres queridos compartiendo un almuerzo montado por Zinedine Zidane.
El Real Madrid cierra su semana de trabajo pendiente del estado del colombiano James Rodríguez que arrastra una leve sobrecarga muscular, con Alvaro Arbeloa con pocas opciones de despedirse en el campo o el banquillo por un esguince de rodilla y el portugués Cristiano Ronaldo midiendo sus esfuerzos en las sesiones para llegar en plenitud de condiciones a la cita.
