El Real Madrid ha conseguido esta noche una gran victoria ante el Mad-Croc Baloncesto Fuenlabrada (75-66) que le coloca en la semifinal de la Copa del Rey, contra el Banca Cívica, en un derbi madrileño que tuvo de todo y que estuvo muy reñido hasta el apretón final de los blancos, que impusieron su experiencia y mayor físico.
El partido fue tremendo, sin nada que echar en falta. La emoción fue constante y ambos equipos consiguieron liderar un marcador que no llegó a desequilibrarse mucho pese al intento de despegue blanco en el tercer cuarto, por lo que la última plaza de semifinalista estuvo más que disputada en un derbi madrileño que nada tuvo que ver con el partido de Liga Endesa.
Entonces Fuenlabrada no fue capaz de competir ni seguir el ritmo del Real Madrid, mientras que esta noche, pese a contar claramente con una plantilla inferior en número, supo administrarse muy bien e incluso sobrevivió a una fase loca de intercambio de canastas y triples donde los de Pablo Laso pocas veces encuentran rival.
Al final esta guerra de guerrillas fue favorable a los de Pablo Laso, que consiguieron su mayor renta al final cuando los nervios pudieron con el Fuenlabrada, que no fue capaz de continuar con el juego desplegado hasta el final que tan buen rendimiento le dio al perder la efectividad en el triple y el norte del choque.
Y es que Fuenlabrada, gracias a Penney, Mainoldi y Laviña estuvo muy acertado desde el triple y ello les sirvió para igualar el poderío de los '-ic' del Real Madrid, que tan pronto machacan el aro como lo perforan desde lejos. Con Mainoldi contestando con esta misma moneda, los minutos fueron pasando con la sensación de que todo se decidiría al final, aunque el final no fue tan ajustado como se intuía.
Con una defensa muy bien puesta, alternando la zona con un marcaje al hombre más efectivo, el Baloncesto Fuenlabrada fue creyendo poco a poco en sus posibilidades al verse jugando de tú a tú con un Real Madrid inferior en la grada, con la mayoría de aficiones del lado naranja, pero que aguantó en la pista con el pundonor de Felipe Reyes, siempre presente en los momentos clave.
Al último cuarto se llegó con todo por disputar gracias a la reacción del 'Fuenla' al final del tercer periodo, y el 55-53 se convirtió en empate en la primera jugada. A partir de aquí, más igualdad no pudo haber. De nuevo el juego entró en una fase de canastas continuadas en ambos lados pero con Fuenlabrada intentado jugar al límite de la posesión, siempre buscando el menor riesgo posible en la selección de tiro.
No obstante, un triple fallido de Mainoldi, que el aro escupió, fue el detonante para que los blancos cogieran un parcial de 5-0 y se escaparan 7 arriba. Fuenlabrada intentó reponerse pero empezaron a fallar acciones fáciles, quizá por cansancio o por no saber interpretar el guión del duelo, y el Madrid tiró de su mayor experiencia para seguir con una renta cómoda, en un castigo demasiado severo para el 'Fuenla'.
