El español Alberto Contador (Saxo Bank) y el británico Christopher Froome (Sky) protagonizan por primera vez en la Vuelta 2012 un "choque de trenes" que se advierte perdurable, por sus condiciones y por su edad, para grandes vueltas por etapas en las que nunca se han medido.
La rivalidad siempre ha puesto marco a la esencia del ciclismo, para la historia quedan las de Anquetil y Poulidor, Merckx y Ocaña, Fignon y Lemond, Delgado y Roche o Miguel Indurain con Bugno.
En la salida de mañana en Pamplona la atracción será este duelo entre "el pistolero" de Pinto y Chris Froome, segundo clasificado del Tour 2012 y que ya el pasado año estuvo a punto de adjudicarse una Vuelta en la que decidió el vigor del cántabro Juanjo Cobo (Movistar), quien también este año intentará revalidar ese triunfo.
Quien no será de la partida mañana en Pamplona es el pequeño de los Schleck, Andy, al no haberse recuperado de la fractura sufrida en el sacro a principios de junio en Dauphiné Liberé. Eso deja en un mano a mano entre Froome y Contador el duelo por el maillot rojo.
El corredor del Movistar Alejandro Valverde y Joaquím Rodríguez (Katusha), tras su segundo puesto de este año en el Giro de Italia, al igual que su compañero de equipo el ruso Denis Menchov, son más potenciales ganadores de esta Vuelta en la que Igor Antón liderará al un fortísimo Euskatel Euskadi.
El italiano Damiano Cunego (Lampre), los belgas Jurgen Van den Broeck (Lotto) y Thomas De Gendt (Vacansoleil) también parten, a priori, como animadores de una carrera que vivirá en 2012 una de las ediciones más interesantes de su historia. Junto al Movistar y Euskatel, la representación española se completa con los equipos de la categoría Continental Caja Rural y Andalucía.
CONTADOR
"Veo la Vuelta muy abierta", ha dicho Contador pero lo cierto es que de los siete corredores con opciones a colocarse bajo los focos, todo se centra en el corredor de Pinto, doble ganador del Tour, y en el keniano de nacionalidad británica. Y si Froome llega en forma, Alberto está enrabietado. Eso también cuenta.
El madrileño ha recibido el apoyo de la afición durante los últimos seis meses en los que ha estado alejado de la competición por su sanción. Al "pistolero" de Pinto se le ha podido ver de incógnito en el puerto de Valdezcaray. Ha subido también el Tourmalet, la Bola del Mundo y la Morcuera. Asimismo, se ha "machacado" preparando las cronometradas.
En definitiva, Alberto ha trabajado a conciencia esta Vuelta en la que Froome personifica el empuje del nuevo ciclismo británico. Contador tiene a su favor el hambre y eso, unido a su clase, puede formar un coctel explosivo si pasa bien la primera semana. Un ejemplo: En 2008 no pudo correr el Tour por el veto a su equipo (Astana) y ganó Giro de Italia, Vuelta a Castilla y León y Vuelta Ciclista a España, entre otras.
Ahora su objetivo es ganar esta Vuelta 2012, por el prestigio que otorga el recorrido y, sobre todo, por el nivel de participación. Después quiere alzarse con el Campeonato del Mundo en Valkenburg (Holanda), cuyo recorrido le es propicio.
Sin embargo, Froome no es cualquiera, tras su buen papel en el Tour y en los Juegos de Londres se halla en un notable estado de forma. Su presencia aquí da lustre a una carrera que ha alzado el vuelo en los últimos años.
La organización, que busca espectáculo a toda costa, ha puesto todo para que el duelo Froome-Contador tenga terreno "abonado" para el espectáculo. Este año se recuperan Lagos de Covadonga o la Bola del Mundo y se presenta al mundo el Collado de la Gallina (Andorra) y el brutal Cuitu Negru (Asturias), que ha sido asfaltado para la llegada de la carrera.
RECORRIDO DE LA VUELTA
Será un recorrido atípico que apuesta por el norte. De hecho, el punto más al sur será Madrid y los escaladores dispondrán de hasta diez opciones de victoria. Navarra, por donde no pasaba la Vuelta desde 1994, lanzará una primera semana de carrera nada fácil.
Después, el escenario será el País Vasco tras su reencuentro del año pasado en el que se cumplían 33 años de ausencia. El Alto de Arrate probará a los escaladores ya en la tercera jornada, demasiado pronto para lo que es costumbre en el diseño de una gran prueba.
Si tradicionalmente la Vuelta a España es una de las tres mejores competiciones de ciclismo del mundo esta vez puede presumir, sin discusión, del brillo y de la pujanza de antaño.
Y es que aquí están los dos mejores para un recorrido exigente. Froome y Contador son los más preparados para un desafío tan colosal y los aficionados al mundo del ciclismo necesitan un duelo así para tomar posiciones, decantar su apego, debatir y "ladearse" hacia un lado u otro. La expectación se refleja también en la difusión televisiva de esta Vuelta, que será muy superior a la de otros años. Alcanza los 150 países y la caravana desplazará a casi 3.000 personas durante los 21 días de competición. Mañana empieza todo.
