21-22. España cae en octavos del Mundial tras perder ante Francia

  • Por un penalti en el último segundo en un partido marcado por la polémica arbitral
  • Nerea Pena: "Que estos árbitros puedan robarnos un pase a cuartos es increíble, eso sí que es dañar al balonmano"

Las guerreras cayeron eliminadas en octavos de final por Francia (21-22), en un partido marcado por la polémica arbitral y por el gol definitivo, de penalti, de las francesas. España mantiene seguro el Preolímpico. Un gol de penalti con el tiempo ya concluido de la francesa Alexandra Lacrabere apeó a la selección española femenina de balonmano del Mundial de Dinamarca, tras caer por 21-22 ante Francia en los octavos de final.

Las numerosas exclusiones con las que el conjunto español, que además perdió por tarjeta roja directa a la extremo Carmen Martín, fue castigado en la segunda mitad, condenaron a las guerreras a una derrota, en un choque en el que España llegó al descanso con una ventaja de tres goles (12-9).

LA MEJOR VERSIÓN DE LAS 'GUERRERAS'

Pero sanción a sanción, España fue perdiendo tanto en ataque como en defensa la disciplina, que le llevó a dominar con claridad un primer período, en el que la selección española mostró su mejor versión posible. Armadas de paciencia, las pupilas de Jorge Dueñas cambiaron por un día la garra y el pundonor, por la serenidad y la clarividencia necesarias para buscar siempre un pase más en cada uno de sus ataques.

Una fórmula que no sólo limitó las pérdidas de balón, uno de los habituales problemas del equipo español, sino que permitió además a las guerreras encontrar siempre a la compañera mejor situada para lograr el gol. Generosidad que tuvo como principales beneficiadas a las jugadoras de segunda línea del conjunto español, tal y como atestigua el hecho, de que 8 de los 12 goles que anotó España en el primer tiempo llevasen la firma de extremos y pivotes.

CHÁVEZ, DESTACADA

Especialmente destacada fue la actuación, en este sentido, de la pivote Eli Chávez, que no sólo anotó los tres lanzamientos que intentó en la primera parte, sino que además forzó el único lanzamiento de penalti que dispuso la selección española en los primeros treinta minutos.

Pero si España cumplió con los deberes en ataque, no menos disciplinada estuvo en defensa, donde las guerreras se emplearon a fondo para evitar los peligrosísimos uno contra uno de las jugadoras galas, mucho más fuertes físicamente que las españolas.

A base de solidaridad y, sobre todo, de muchas piernas, el equipo español cerró cada hueco posible a un conjunto francés, que cuando encontró un resquicio se topó con una excepcional Silvia Navarro que cerró el primer período con siete paradas.

Férrea defensa que tan sólo pudo quebrar la lateral Allison Pineau, que con sus cuatro goles, el último sobre la bocina, en el primer tiempo, impidió que España abriese una brecha definitiva (12-9) en el marcador al llegar al descanso.

CARRUSEL DE EXCLUSIONES

Un magnífico planteamiento y ejecución de partido por parte del equipo español, que se quedó en nada por el carrusel de exclusiones en que se convirtió la segunda mitad y del que España salió peor parada. Lastrado por las continuas inferioridades numéricas, el conjunto español no logró dotar nunca a su defensa la solidez que mostró en el primer período.

Un grave problema que no tardó en trasladarse al ataque español, que inseguro atrás, comenzó a perder poco a poco la fe en el pausado juego que le llevó a dominar con claridad el marcador en los primeros treinta minutos. Circunstancia que Francia no desaprovechó para igualar, de la mano de unas inspiradas Alexandra Lacrabere y Gnosniane Niombla, la contienda (18-18) a falta de trece minutos para la conclusión.

Un varapalo del que España pareció rehacerse con las paradas de Silvia Navarro, que dieron a las guerreras la tranquilidad necesaria para volver a buscar en ataque a una Eli Chávez, que con dos goles consecutivos devolvió a las de Jorge Dueñas (m.51) la delantera (20-18) en el tanteador.

Pero una nueva exclusión de Patricia Elorza a falta de cuatro minutos y, sobre todo, una última de Lara González, a falta de veinte segundos para la finalización, condenaron a España a una dolorosa derrota y eliminación, que se escenificó, de la manera más cruel posible, con el gol de penalti, ya con el tiempo concluido, con el que Lacrabere estableció el definitivo 21-22.

NEREA PENA: "QUÈ PUTA VERGUENZA"

Nerea Pena ha criticado duramente a los colegiados alemanes Robert Schulze y Tobias Tönnies tras la eliminación de España en los octavos de final del Mundial femenino de balonmano contra Francia: “¡Qué puta vergüenza! Que estos árbitros puedan robarnos un pase a cuartos es increíble, eso sí que es dañar al balonmano”, ha tuiteado la central de la selección española, máxima goleadora de las ‘Guerreras’ con siete tantos.

“Asumimos nuestros errores, pero hoy los colegiados nos han condenado. Me siento orgullosa de cada una de mis compañeras. Mil gracias a todos por los miles de mensajes de apoyo. No dudéis que volveremos con más fuerza. Las guerreras nunca se rinden”, ha escrito por su parte la extremo Eli Pinedo.