En el año 1992, Woody Allen estrenó su película Maridos y mujeres. En ella, un la separación de una pareja de amigos provocaba que un profesor de literatura y su mujer, Carlota, se plantearan su relación. Fue un título premonitorio: Mia Farrow, protagonista del filme y entonces mujer de Woody Allen, se separaría poco después de concluir el rodaje al descubrir la relación del cineasta con la hija de la actriz, Soon-Yi Previn.
Àlex Rigola, ex director del Teatre Lliure, ha convertido ahora esta película en una obra de teatro, que se representa en el teatro de la Abadía: Luis Bermejo, Israel Elejalde, Miranda Gas, Elisabet Gelabert y Alberto Jiménez. El espacio escénico es de Max Glaenzel, la iluminación de Maria Doménech y el vestuario de Vanessa Actif.
Definida por el director barcelonés como "un retrato crudo y obsceno de las relaciones de pareja", Maridos y mujeres no nació, como otras obras de Allen, en el teatro, ni existe una adaptación escénica anterior conocida.
