El nombre de Eastman Kodak, que se ha declarado en bancarrota, va a ser retirado de la emisión por televisión de la gala de los Oscar de este domingo.
La ceremonia "será en directo desde el Highland Center en Hollywood, California. Es lo que el propietario nos ha pedido hacer y lo que vamos a hacer", dijo Tom Sherak, presidente de la Academia de las Artes y Ciencias Cinematográficas, en una entrevista en una cadena de televisión de Los Ángeles.
El anuncio se produce tras muchas especulaciones sobre si la empresa que en su día dominó la fabricación de película y el negocio de la fotografía mantendría su nombre en el teatro donde se entregan los Oscar tras declararse en bancarrota este año.
EL FIN DE UNA ERA
Kodak firmó un acuerdo por 74 millones de dólares (más de 56 millones de euros) en el año 2000 para poner su nombre en el teatro de 3.400 asientos en Hollywood que alberga la ceremonia anual de la Academia y donde también presenta sus espectáculos el Circo del Sol.
El acuerdo para los Oscar era un enorme foco de publicidad para la marca Kodak. No en vano los premios de la Academia son el segundo acontecimiento más visto en televisión después de la Super Bowl. El año pasado la ceremonia fue seguida por 37,6 millones de personas.
Pero la ley de bancarrota permite a la compañía renunciar al resto del acuerdo por 20 años, y solicitar que se retire su nombre del evento de forma inmediata. Tal y como así ha sucedido después de que la semana pasada un tribunal de Nueva York aceptara su petición.
