El taller de Picasso, laboratorio experimental de toda su obra

  • Fundación Mapfre reúne Renacimiento y Vanguardia en una doble exposición sobre Picasso y Pontormo en Madrid

Fundación Mapfre ha presentado en Madrid este lunes una doble exposición en la que reúne obras del pintor italiano del siglo XVI Jacopo Carucci (conocido como Pontormo) y del malagueño Pablo Picasso para realizar un acercamiento "íntimo" a la figura de ambos artistas y su trabajo en el taller.

La recopilación, que está expuesta al público de forma gratuita hasta el próximo 11 de mayo, incluye un total de 80 lienzos, 60 dibujos y grabados, 20 fotografías y materiales del artista español como paletas o pinceles procedentes de distintas colecciones públicas y privadas, que ocupan dos plantas del edificio de exposiciones de la fundación.

Por parte de Pontormo, la exposición recoge una selección de 60 dibujos de todas sus etapas, que en su mayoría proceden de la Galleria degli Ufizzi florentina, además de otros nueve dibujos de grandes pintores como Durero, Tiépolo, Poussin o Lorenzo di Credi que permiten "hacer un contraste" y "establecer un diálogo" entre los distintos artistas. según ha explicado el comisario de la muestra sobre el pintor renacentista, Kosme Barañana.

Los dibujos son, en su mayoría, bocetos preparaciones, estudios y detalles de otras obras, procedentes del trabajo del artista en el taller.

Además, la exposición incluye un diario del artista "que incluye diversos aspectos de su personalidad" y que se presenta por primera vez al público, según ha explicado el presidente de la Fundación Mapfre, Alberto Manzano.

El director general del Instituto de Cultura de la Fundación Mapfre, se ha mostrado "muy contento" de que ambas muestras convivan debido a que, "tanto Pontormo y Picasso son dos extraordinarios dibujantes y entre ellos se pueden establecer muchas relaciones".

En el caso del pintor italiano ha indicado que "tiene una serie de características que hacen de él un pintor que ha aguantado muy bien el paso del tiempo y que permiten reconocer su intensidad y la fuerza también en la actualidad y puede que incluso mucho mejor".

Aún así, Barañana ha lamentado que "es un artista con mala suerte porque se conservan muy pocos cuadros suyos" y porque "algunos de ellos no están en buen estado".

Por parte del pintor español, ha asegurado que muestra "un Picasso muy especial, dentro de lo especial que Picasso es de por sí" porque presenta "al Picasso más íntimo de su taller, que trabaja, que repite los mismos temas y que empieza a tomar el taller como un tema pictórico más".

De hecho, ha asegurado que en ocasiones "parece que se está mirando por encima del hombro del artista" cuando se visita la exposición.

En este sentido, la comisaria de la muestra sobre el pintor malagueño y ex directora del Museo Picasso de Barcelona, Maite Ocaña, ha explicado que "no es la primera exposición que se lleva a cabo sobre este artista en su taller".

Aún así, ha incidido en que "es una exposición que muestra un discurso y un recorrido por una parte importante de la obra focalizada en el taller como espacio de experimentación y trabajo y en el taller como reflexión sobre la pintura a través del pintor y su modelo".

A su juicio, "muestra lo importante que era para él la reflexión sobre la esencia de la pintura. Para Picasso lo importante es ser pintor y la fuerza del pintor".

De hecho, ha subrayado que la exposición, que se inicia con el Autorretrato con Paleta'(1906) y finaliza con el, también autorretrato, Hombre en el taburete (1969), recorre a través de los distintos trabajos y las modelos recurrentes como Jacqueline, François o Marie Teresse y muestra como "se convierten en arquetipos que inundan todas sus pinturas".