El miércoles se decide si hay huelga en el fútbol español

  • El Gobierno, molesto con la amenaza de los clubes de no jugar el primer fin de semana de abril
  • José Luis Astiazarán, ha reiterado que "hay muy pocas opciones" de que el próximo fin de semana haya partidos

La titular del juzgado de primera instancia número 63 de Madrid, Purificación Puyol, ha decidido aplazar su decisión sobre la posible adopción de medias cautelares solicitada por seis clubes para que no se paralicen las jornadas de la Liga BBVA y la Liga Adelante previstas para el fin de semana del 2 y 3 de abril.

La Asamblea de la LFP acordó este paro patronal con el objetivo de conseguir que se anule la obligatoriedad de transmitir un partido en abierto todas las jornadas y que se cambie la Ley del Juego, para que los clubes reciban mayores beneficios por las apuestas.

Sin embargo, Athletic, Espanyol, Real Sociedad, Real Zaragoza, Sevilla y Villarreal se opusieron a esta decisión y presentaron una demanda para que se anule este acuerdo, solicitando medidas cautelares dada la premura temporal.

Los clubes demandantes quieren que se dispute la jornada completa o al menos los partidos en los que intervienen sus equipos, pero, de no adoptarse esas medidas, el proceso principal quedaría sin objeto una vez que no jueguen los partidos.

Sin embargo, antes de tomar una decisión la magistrada desea escuchar también los argumentos de la parte demandada en una vista que se celebrará en la sala de audiencias de los juzgados de María de Molina el próximo 29 de marzo (10.00 horas). De esta forma se acuerda que "no ha lugar a la adopción de las medidas cautelares solicitadas sin audiencia de la parte demandada y se convoca a las partes a esta vista".

"La parte actora y la demandada podrán exponer lo que convenga a su derecho sirviéndose de cuantas pruebas dispongan que se admitirán y practicarán si fueran pertinentes", explica en el comunicado, remitido por el tribunal.

A la espera de la resolución, la Real Federación Española de Fútbol decidió anunciar los árbitros que dirigirían los partidos de esa jornada, aunque la LFP no ha ofrecido los horarios de los encuentros y mantiene su postura.

El presidente de la Liga de Fútbol Profesional, José Luis Astiazarán, ha reiterado que "hay muy pocas opciones" de que el próximo fin de semana haya partidos. "Fue una decisión del órgano máximo de representación de la Liga y, por lo tanto, está amparada por la absoluta legalidad de los estatutos de la Liga", valoró.

El Gobierno, molesto con la amenaza de clubes de no jugar el primer fin de semana de abril

El vicepresidente primero y portavoz del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha dejado claro este viernes su malestar por la amenaza de los clubes de fútbol de la Liga BBVA y Adelante de no jugar la jornada de Liga del primer fin de semana de abril si no se atiende su reivindicación de eliminar la obligatoriedad de emitir un partido en abierto.

Preguntado por el asunto cuando ya abandonaba la sala de prensa, tras la rueda de prensa habitual del Consejo de Ministros, Rubalcaba ha replicado que no le parece la mejor forma de presionar. Según el vicepresidente, que ha recordado que en España siempre ha habido un partido en abierto, todo se puede dialogar, pero la Ley Audiovisual se reformó hace sólo un año y entonces nadie planteó este asunto.

El portavoz del Gobierno ha abundado así en las advertencias que hizo ayer el secretario de Estado para el Deporte, Jaime Lissavetzky que, aunque se mostró "abierto al diálogo", avisó de que el Consejo Superior de Deportes no va "aceptar una imposición". "Bajo esta amenaza o presión es difícil llegar a acuerdos", declaró desde Santander.

Lissavetzky se mostró sorprendido por que el Gobierno ofrezca "diálogo" y reciba sin embargo una postura que, añadió, le ha "extrañado mucho" por la "dureza" de la misma, la "premura" de tiempo y, además, por el hecho de que se trate de un debate que no estaba encima de la mesa hace un año, cuando se aprobó la Ley Audiovisual. "Una ley no se puede cambiar de la noche a la mañana", sentenció, después de recordar que ningún grupo en el Congreso de los Diputados planteó entonces la eliminación del partido en abierto. "Lo que no puede ser, no se puede ser y, además, es imposible", resumió.