Llegó el momento decisivo para el Real Madrid en el Top 16. A falta de dos jornadas, seis equipos luchan por las tres plazas que quedan para acceder al playoff de la Euroliga. El actual campeón de Europa es uno de ellos. Con la derrota del Olympiacos ante el Khimki, los blancos vuelven a tener en sus manos la clasificación en las dos finales que les quedan. La primera, este viernes frente al Laboral Kutxa en Vitoria (20:30 h, Onda Madrid).
En su cabeza solo está ganar en el Buesa Arena para jugársela frente al Khimki en la última jornada en el Palacio. Incluso con un triunfo por más de 9 puntos tendría opciones de terminar segundo si se diera una serie de resultados en la jornada final. La derrota complicaría su pase entre los ocho mejores.
EL REBOTE, LA CLAVE
En los tres partidos en los que se han visto las caras ambos conjuntos esta temporada el rebote ha sido la llave del triunfo. Willy y Thompkins son duda ante un juego interior liderado por el exmadridista Bourousis y cuyo mayor peligro es su versatilidad y capacidad reboteadora. Quien si estará respecto a los otros partidos es Rudy, un jugador fundamental para el conjunto blanco.
Tal y como afirmó Laso en la previa, el Real Madrid debe tener continuidad defensiva y ofensivamente. No valen rachas buenas ante jugadores de la calidad de Adams, James, Hanga o Causeur, éste último duda en los locales. Un Laboral Kutxa que tampoco se fiará mucho del campeón de Europa. Los blancos ya han demostrado que se crecen en las situaciones más adversas.
