Nadal ha revelado que viene sufriendo un dolor en la espalda que le ha obligado a bajar la intensidad de sus servicios en Roland Garros, pero no quiso dar detalles de la lesión.
"No voy a hablar de la espalda. Estoy en competición, en la segunda semana, disfrutando de ello y voy a hacer todo lo posible para estar competitivo. Pelear, voy a pelear", señaló el balear tras derrotar en tercera ronda al argentino Leonardo Mayer por 6-2, 7-5, 6-2.
APARECIERON EN EL PRIMER PARTIDO
"No importa a nadie, no quiero ni faltar el respeto a ningún rival ni ayudar a nadie, ni perjudicarme a mi mismo. Lo único importante es que he ganado un partido en tres set", afirmó.
Nadal indicó que sintió ese dolor en el primer partido y que se repitió en el segundo, lo que le obligó a "sacar más despacio de lo habitual". Pero no quiso afirmar si se trata de los mismos problemas físicos que le mermaron en la final del Abierto de Australia contra el suizo Stan Wawrinka.
