Garbiñe Muguruza jugará por primera vez en su carrera semifinales de Roland Garros, después de superar (7-5, 6-3) a la estadounidense Shelby Rogers, Muguruza aprovechó su tercera vez en cuartos de final en el segundo grande de la temporada para estirar su conquista en la tierra francesa. La finalista el año pasado en Wimbledon se rehizo a un inicio complicado y de tensión para terminar sumando la 20ª victoria de la temporada.
La tenista nacida en Caracas comenzó perdiendo su saque. Sufriendo y precipitada, Muguruza logró reconducir su energía hacia dos buenos juegos finales al resto con los que se hizo con la primera manga. Con la iniciativa del encuentro de su parte, la hispano-venezolana rompió de inicio en el segundo set a su rival y guardó su saque con autoridad.
A pesar de que Rogers logró meterse en el partido con un break en el quinto juego, Muguruza impuso galones para ponerse en disposición de buscar la final de otro grande. La española se medirá ahora Samantha Stosur, dejando cada vez más atrás la ansiedad de principio de temporada por dar continuidad a su gran 2015.
Muguruza: "Haber vivido esto me abre los ojos"
MUGURUZA: "HABER VIVIDO ESTO ME ABRE LOS OJOS"
Muguruza afrontará sus primeras semifinales de Roland Garros con la ventaja de haber superado ya esa ronda en Wimbledon, una experiencia que, afirmó, le "abre los ojos". "Estoy más tranquila, dentro de los nervios, pero haberlo vivido una vez, te cambia la siguiente, te abre los ojos, te enseña lo que tienes que hacer, lo que te fue bien, lo que te fue mal. Es mejor haberlo vivido que no", destacó.
Muguruza, de 22 años, recordó que su rival por un puesto en la final, la australiana Samantha Stosur, diez años mayor, también sabe lo que es llegar a la final de un grande, algo que logró en 2010 en este mismo torneo.
"Es difícil afrontar con tranquilidad un partido así. Hay que dejar a un lado la ronda y lo que conlleva y pensar más en lo que yo tengo que hacer para estar más preparada para el partido", comentó.
Muguruza aseguró que estos días en París está algo aislada de la actualidad del torneo, rodeada de su familia, con la que trata de entretenerse lo más posible para controlar las emociones. No quiere hablar de favoritismo, porque, asegura, cualquier rival te puede apear del torneo, como demostró hoy el hecho de que la número 108 del mundo, la estadounidense Shelby Rogers, dispuso de una bola de set en la primera manga.
"Respeto a todas las jugadoras con las que me encuentro, si están ahí no me puedo despistar, si juego mal me van a ganar. Tengo ganas de seguir avanzando, soy muy ambiciosa y me gustaría llegar a la final", aseguró.
Muguruza, que en las dos últimas ediciones había caído en cuartos de final en París, confesó que empezó algo nerviosa su duelo contra Rogers.
"Ella ha jugado muy bien, muy suelta, pegando fuerte a la pelota y yo estaba algo nerviosa. Apenas conocía a esta jugadora, es poco normal, solo lo que había visto en partidos anteriores. Me ha ayudó que cayera de mi lado el primer set, me ha ayudado a decirme que tenía que pillar el mando del partido", indicó. Aunque señaló que "han caído muchas cabezas de serie", Muguruza aseguró que no hay que menospreciar a ninguna rival.
"Con respecto al partido de hoy tengo que intentar dominar más rápido el partido. No esperar a tener una bola de set en contra para reaccionar", afirmó. Sobre Stosur, aseguró que "tiene experiencia y en tierra batida está jugando muy bien", por lo que espera "un partido difícil" como corresponde a unas semifinales de un Grand Slam.
