Se ha convertido en un clásico, en una pauta a seguir, en un mecanismo de presión. Plantarse con una frase "sólo quiero jugar en el Real Madrid". Desde Ronaldo "el fenómeno" hasta Coentrao, con alguna excepción más o menos notable. Modric está haciendo, exactamente, lo que antes hicieron otros.
El primer plante sonado culminó en verano de 2001 con el fichaje de Zinedine Zidane. Una pregunta ¿quieres venirte al madrid? A partir de ahí, el frances presionó a la Juve para que aceptara los 12.000 millones de pesetas que ofrecía el Madrid. Y vino.
El verano de 2002 sería de un Ronaldo, totalmente seducido por el Real. Así que aprovechó su pésima relación con Cúper para obligar a Moratti a venderle. Y lo consiguió
Un año después, el Madrid anuncia el fichaje de David Beckhan, ante la perpleja mirada de Joan Laporta, que había anunciado la contratación del inglés por el Barça, con rúbrica del United incluída.
Año 2005. De nuevo el Manchester anunciaba lo siguiente:" a petición de Cristiano, que ha vuelto a expresar su deseo de fichar por el Madrid, el united da permiso para hablar". Pura formalidad. El jugador ya había hablado: para decir me voy al Madrid.
Hay más casos. El penúltimo lo protagonizó Coentrao, que se negó a viajar con el Benfica a Suiza . Ahora es Modric. Pero hay un detalle de diferencia a éste... de otros casos: la directiva madridista no va a pagar más de 30 millones. Ni un euro más. El tottenham debe decidir si lo toma o lo deja.
